Italia, 18 de diciembre de 2024.- Stellantis anunció una inversión de 2,000 millones de euros para sus plantas en Italia durante una reunión con el Gobierno italiano en el Palazzo Piacentini, sede del Ministerio de Empresa y Made in Italy. Este compromiso forma parte de los esfuerzos por abordar la crisis del sector automotriz, proteger a los 25,000 trabajadores en riesgo y avanzar en la transición tecnológica.
El ministro de Empresa y Made in Italy, Adolfo Urso, destacó que el Gobierno destinará más de 1,000 millones de euros en 2025 para apoyar la transformación industrial del sector. 'Ahora podemos volver a poner a la industria automovilística italiana y europea en el buen camino', afirmó Urso al presentar el Plan Italia, diseñado para consolidar a Italia como un eje estratégico en el desarrollo de Stellantis.
Jean-Philippe Imparato, director para Europa de Stellantis, aseguró que todas las plantas italianas permanecerán operativas y que la capacidad de producción aumentará en 2026 con la incorporación de nuevos modelos. Además, Stellantis planea realizar compras por 6,000 millones de euros a proveedores italianos y ampliar la producción del Panda en la planta de Pomigliano hasta 2030. A partir de 2028, esta planta fabricará nuevos modelos compactos sobre la plataforma Stella-Small.
El presidente de Stellantis, John Elkann, enfatizó el compromiso de la compañía con Italia y Francia en un contexto de transición institucional tras la dimisión del consejero delegado Carlos Tavares, cuyo sucesor será anunciado en 2025.
No obstante, los sindicatos, como Fiom CGIL y Fim, exigen mayor claridad sobre los planes de producción y la renovación del fondo de despido, señalando que sin esta medida 25,000 empleos están en riesgo. Stellantis y el Gobierno italiano enfrentan el desafío de equilibrar la modernización de la industria con la protección de su fuerza laboral.
Stellantis invertirá 2,000 millones de euros en Italia para 2025

Más reciente



Trump anuncia pausa de un mes en aranceles para vehículos de México y Canadá
Donald Trump suspende hasta el 2 de abril los aranceles del 25% a vehículos ligeros provenientes de México y Canadá, tras conversaciones con General Motors, Ford y Stellantis.
