Ciudad de México a 21 de julio de 2025. - CIAL Dun & Bradstreet, empresa líder en soluciones y análisis avanzado de datos, presenta una nueva edición de su monitor económico CIAL Insights, en la cual expone las dinámicas económicas más relevantes de México y la región.
Según su análisis, la inflación en Estados Unidos aumentó por segundo mes consecutivo, situándose en 2.7% anual en junio, frente al 2.3% registrado en abril. De acuerdo con CIAL Dun & Bradstreet, este repunte podría ser uno de los primeros efectos inflacionarios derivados del entorno arancelario que se ha implementado recientemente en ese país. En contraste, el desempleo se mantuvo estable en 4.1% durante junio, sin cambios significativos en el último año.
El impacto de la política arancelaria fue más evidente en el déficit comercial estadounidense, que se redujo de manera considerable a 86 y 98 mil millones de dólares en abril y mayo, respectivamente, coincidiendo con el inicio de la imposición de dichos aranceles.
En el caso de México, CIAL Dun & Bradstreet señala que, hasta el momento, las exportaciones manufactureras no han resentido de forma generalizada los efectos arancelarios. Estas representan cerca del 90% del total exportado y registraron un crecimiento de 1.5% anual en mayo, con un promedio de 5.0% durante el periodo enero-mayo. Las exportaciones hacia EE.UU., que constituyen el 84% del total, cayeron apenas 0.7% anual en mayo.
Sin embargo, el sector de acero y aluminio comienza a mostrar señales de afectación. CIAL Dun & Bradstreet advierte que, tras la imposición de un arancel del 50% a estos productos, ya se observa un fuerte impacto. Las exportaciones de hierro y acero sufrieron una caída del 21.0% anual en mayo, un nivel de contracción que no se había visto desde la crisis pandémica de 2020. En el caso del aluminio, también se comienzan a notar efectos negativos y un cambio en la dinámica exportadora.
Respecto al crecimiento económico, con base en datos del INEGI, CIAL Dun & Bradstreet estima que la economía mexicana habría crecido 1.3% anual en junio, impulsada por un crecimiento del 2.0% en el sector terciario, aunque con una contracción del 0.6% en el sector secundario. Con ello, se proyecta un crecimiento de 1.2% anual para el segundo trimestre de 2025, lo que representaría una leve recuperación frente al 0.6% del primer trimestre y al 0.4% del cuarto trimestre de 2024.
No obstante, el panorama general sigue siendo desafiante. De acuerdo con CIAL Dun & Bradstreet, México ha crecido en promedio apenas 0.8% anual entre 2019 y 2024, cuando las necesidades estructurales del país exigen un crecimiento sostenido cercano al 4.0% anual.
Frente a las condiciones adversas actuales, tanto internas como externas, la firma mantiene su previsión de crecimiento para México en 0.4% en 2025, por debajo del 1.4% alcanzado en 2024. En contraste, se espera que Estados Unidos crezca 1.2%, encadenando dos años consecutivos con mejor desempeño que la economía mexicana.
En conclusión, CIAL Dun & Bradstreet considera que el país requerirá una política más decidida para enfrentar este entorno complejo y fomentar un mayor nivel de inversión —nacional y extranjera— como la vía más efectiva para impulsar el crecimiento económico.