Alemania, 29 de septiembre de 2025.- Volkswagen enfrenta un periodo de ajustes en sus plantas de Alemania debido a la desaceleración en la demanda de automóviles eléctricos, lo que ha derivado en paros temporales y reacomodos estratégicos. Las instalaciones más afectadas son Zwickau y Emden, dos centros clave para su ofensiva eléctrica.
En Zwickau, Sajonia, donde se ensamblan el ID.3, el Cupra Born y el Audi Q4 e-tron, la compañía detendrá la producción durante una semana a partir del 6 de octubre. El recorte responde a una demanda menor de lo previsto, en particular del Audi Q4 e-tron, impactado por los aranceles de Estados Unidos. En Emden, en la costa norte alemana, responsable de fabricar los modelos ID.4 e ID.7, ya se han reducido las horas de trabajo y se prevén nuevas paradas en las líneas de montaje.
Otras plantas del grupo también ajustan su operación. La fábrica de Hannover, donde se producen el ID.Buzz eléctrico y el T7 Multivan, permanecerá cerrada durante cinco días durante las vacaciones de otoño. En Osnabrück, la producción del modelo descapotable disminuye por la baja demanda, mientras que Wolfsburgo vive la situación contraria: allí, donde solo se ensamblan modelos con motor de combustión, se han programado turnos extraordinarios.
Tras tres meses de negociaciones con los sindicatos, Volkswagen alcanzó un acuerdo que garantiza la continuidad de sus diez plantas alemanas y la seguridad laboral hasta 2030. A cambio, los trabajadores aceptaron reducir beneficios, limitar la contratación de aprendices y recortar capacidad en cinco centros de producción, evitando cierres y despidos forzosos.
Como parte de este plan, la producción del Golf —uno de los modelos más emblemáticos de la marca— será trasladada de Wolfsburgo a México. Con ello, la empresa busca optimizar su capacidad y responder a un mercado de eléctricos cuyo crecimiento en Europa avanza de forma más lenta e irregular, en un contexto de fuerte competencia, especialmente de fabricantes chinos.
La reestructuración, que contempla la eliminación de 35 mil empleos en Europa hasta 2030 mediante prejubilaciones y ajustes naturales, refleja el reto de Volkswagen para mantener su competitividad en un entorno de transición hacia la electromovilidad que exige inversiones millonarias en baterías, software y nuevas plataformas.
Con información de Market Screener