León, Guanajuato, 18 de septiembre de 2025.- En la primera parte de este reportaje presentamos a Yamaguchi, Biodata Bank, Cosmo y Fujita Rashi, compañías japonesas que participaron en el pabellón organizado por la Japan External Trade Organization (Jetro) durante el Foro de Proveeduría Automotriz 2025. En esta segunda entrega continuamos con el recorrido por otras empresas que confirman el compromiso de Japón con el fortalecimiento de la cadena de suministro automotriz en México.

Kurota: un siglo de experiencia en sistemas de frenado y motor

Kurota, con más de cien años de historia, fue fundada en 1925 en Japón y posteriormente expandió sus operaciones a Tailandia en 2005 y México en 2015. Luis Quezada, responsable del área de ventas en Kurota México, explicó que la empresa centra sus productos en el sistema de frenado de aluminio y así como en partes de motor de acero. Además, han desarrollado torquímetros que apoyan al área de producción evitando daños a herramentales e insertos. También, desde su llegada a Aguascalientes, Kurota ha logrado certificaciones clave como la IATF 16949 y ISO 14001, además de reconocimientos de sus clientes. 

“Tenemos algunos certificados, se llaman Certificate of Award que recibimos de nuestros clientes por los cuales estamos reconocidos como mejores proveedores a nivel nacional y global”, señaló Quezada.

Su sede mexicana se encuentra en San Francisco de los Romos, en el Parque Industrial San Francisco 4, donde continúa reforzando su posición como proveedor confiable de la industria automotriz.

Teikoku: innovación en tintas para la industria automotriz

Con 130 años de historia, Teikoku Ink ha transformado su negocio original de tintas para periódicos y recibos hacia aplicaciones mucho más especializadas, dejando atrás el enfoque B2C para centrarse en soluciones B2B orientadas a usos empresariales. Esta evolución refleja su capacidad para adaptarse a las demandas del mercado y a la innovación tecnológica en distintos sectores industriales.

Hoy, la empresa se enfoca en la producción en Japón de tintas para tableros, switches y pantallas de vehículos, incluyendo aquellas que protegen contra ondas electromagnéticas. Estas tintas no solo mejoran la funcionalidad de los dispositivos electrónicos en automóviles, sino que también aportan mayor seguridad y confiabilidad en su operación, lo que evidencia el nivel de especialización técnica alcanzado por Teikoku.

En el mercado mexicano, Teikoku ya cuenta con contactos y realiza algunas exportaciones, consolidando así su presencia en la región. Existe también un interés en explorar, a futuro, la posibilidad de fabricar localmente sus productos, lo que permitiría ampliar aún más su participación y fortalecer su posicionamiento en la industria tecnológica del país.

Hanshin Neji: soluciones en tornillería con enfoque en calidad

Hanshin Neji, empresa japonesa con 75 años de experiencia, abrió su filial en México en septiembre de 2024. Alex Monroy, encargado de ventas y soporte técnico, compartió que la firma se especializa en “todo lo que es tornillería, sujetadores, aplicaciones especiales”.

“Lo que estamos buscando es poder ayudar a los clientes a resolver problemas de tornillería. Se ha detectado que aquí en México hay muchos problemas de tornillos capados o tornillos rotos, por las malas prácticas y desconocimiento de los principios básicos de los tornillos”.

La compañía busca más que solo comercializar sus productos, enfocándose en transmitir su conocimiento y ofrecer soluciones integrales. Su objetivo principal es que los clientes queden satisfechos y se beneficien de la experiencia acumulada por la empresa para ayudar a resolver sus problemas, priorizando el valor de la asesoría y el acompañamiento por encima de la venta en sí.

Su operación en México se concentra en Querétaro, en el municipio de El Marqués, donde cuentan con un almacén que maneja “aproximadamente más de 100 mil números de parte diferentes”, todos producidos en Japón.

Minamida: forja en frío para dirección y chasis

Minamida Mexicana comenzó operaciones en 2018 en México, bajo la dirección de Umehara Hiroshi, quien ha estado al frente desde el arranque de la planta. El corporativo, fundado en Japón en 1933, decidió expandirse primero a Tailandia antes de establecerse en México para aprovechar el potencial del mercado automotriz local.

“Nos dedicamos al proceso de forja en frío, enfocándonos en la fabricación de autopartes para sistemas de dirección y chasis”, explicó Umehara.

La compañía atiende a clientes Tier 1 y Tier 2, principalmente japoneses, pero también colabora con empresas europeas como Schaeffler y ZF. Su presencia en México permite ofrecer fabricación local, lo que ayuda a reducir tarifas, evitar variaciones en tasas y responder de manera rápida a las necesidades de los clientes.

En Japón, Minamida produce también tornillos para construcción y otros usos no automotrices, pero el crecimiento de la venta para el sector automotriz los impulsó a abrir su planta mexicana, consolidando así su presencia en la región.

Makita: herramientas japonesas al servicio de la industria

Makita, reconocida marca japonesa de herramientas, participó en el pabellón con una propuesta de valor dirigida a la industria automotriz. Abraham Palacios, especialista de producto, detalló que la compañía ofrece una amplia gama de equipos:

“Manejamos taladros, aspiradoras, esmeriles, también inclusive motosierras, equipos de jardinería. Para diferentes tipos de trabajos, tanto de carpintería como de construcción, metal, mecánica”.

En el ámbito automotriz, la empresa se centra en brindar soluciones y apoyo en las líneas de ensamble, especialmente con su línea de herramientas de batería. Makita ofrece diferentes segmentos de baterías de 40, 18 y 12 volts, destacando que los equipos de 40 volts son competitivos frente a herramientas eléctricas alámbricas o de combustión.

Esta segunda parte del recorrido por el pabellón de Japón en el Foro de Proveeduría Automotriz 2025 confirma el dinamismo de las empresas japonesas en México. Kurota, Teikoku, Neji, Minamida y Makita, cada una desde su especialidad, fortalecen la cadena de valor automotriz y demuestran la creciente cooperación entre ambos países para afrontar los retos de un sector en constante transformación.