Michigan, Estados Unidos, 21 de febrero de 2025.- En un movimiento estratégico, Toyota ha intervenido para respaldar la planta de baterías para vehículos eléctricos de LG Energy Solution en Lansing, Michigan, tras la salida de General Motors (GM) del proyecto. La automotriz japonesa ha colocado un pedido de 1.5 mil millones de dólares para impulsar las operaciones en la instalación, lo que garantizará su viabilidad y continuidad.
GM había alcanzado un acuerdo no vinculante con LG en diciembre para vender su participación en la planta, que formaba parte de su empresa conjunta Ultium Cells. Sin embargo, en octubre, la compañía estadounidense anunció el fin del uso de la marca Ultium, aunque aseguró que seguiría desarrollando su tecnología de baterías. Ante esta decisión, Toyota decidió intervenir y redirigir un pedido existente desde otra planta de LG en Michigan para apoyar el proyecto.
Según fuentes citadas por Automotive News, la transacción se concretará una vez que LG complete la adquisición de la participación de GM en la planta, lo cual se espera para la primavera de 2025.
La decisión de Toyota se produce en un contexto de incertidumbre para la industria de vehículos eléctricos en EE. UU., luego de que la administración de Donald Trump amenazara con retirar incentivos gubernamentales para el sector. Ante esta situación, varias automotrices, incluidas Ford y GM, han reducido sus planes de electrificación, lo que ha generado dificultades para fabricantes de baterías como LG Energy, que buscan nuevos clientes para mantener la demanda.
LG ha indicado que, además de suministrar baterías para vehículos eléctricos, está explorando oportunidades en el sector de almacenamiento de energía para centros de datos, impulsado por el crecimiento de la inteligencia artificial.
A pesar de los cambios en el panorama de la movilidad eléctrica, la planta de LG en Michigan sigue en marcha y se espera que inicie producción próximamente. En un comunicado, la empresa surcoreana afirmó: “Esto forma parte de nuestro objetivo estratégico para optimizar aún más nuestras inversiones en América del Norte y responder a las necesidades de los fabricantes de automóviles globales.”
Mientras tanto, Toyota avanza con su propia estrategia de electrificación en la región. A inicios de este mes, la compañía anunció que su primera planta de baterías en EE. UU., Toyota Battery Manufacturing North Carolina, comenzará a producir baterías para vehículos híbridos y eléctricos en abril. Con una inversión cercana a los 14 mil millones de dólares, esta instalación se convertirá en el nuevo epicentro de la producción de baterías de Toyota en América del Norte.
Con este movimiento, Toyota no solo fortalece su relación con LG Energy Solution, sino que también refuerza su compromiso con la electrificación en un entorno de incertidumbre regulatoria y cambios estratégicos en la industria automotriz.