CDMX, 09 de septiembre del 2024.- Este lunes 9 de septiembre
se celebra el Día Mundial del Vehículo Eléctrico, una fecha clave para
reflexionar sobre la importancia de la electromovilidad y su impacto positivo
en la reducción de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Aunque sigue siendo un tema de controversia y dimes y diretes, es un hecho que
los vehículos eléctricos están marcando una diferencia con un crecimiento que,
si bien se ha moderado, sigue por encima de sus contrapartes de combustión
interna.
De acuerdo con un análisis de Evergo, se ha mostrado cierto escepticismo
por parte de algunos analistas del sector respecto del ahorro total de
emisiones por parte de los vehículos eléctricos, sobre todo considerando lo
emitido durante su fabricación, así como el origen de la energía eléctrica que
los recarga. Esto significa que, si la electricidad provenía de plantas
generadores impulsadas con carbón o combustóleo, el ahorro en emisiones por no
usar combustión interna no resultaba tan aparente. El punto es válido, pero un
estudio reciente de BloombergNEF,
centro de investigación enfocado en nuevas energías confirma de manera
minuciosa que la ventaja de los vehículos eléctricos sobre los de combustión
interna existe, y será más amplia hacia el 2030.
Esta organización midió de forma detallada las emisiones
totales que provocan ambas clases de vehículos, eléctricos y de combustión
interna, desde su fabricación hasta el fin de su vida útil. El estudio se hizo
en cinco países (Estados Unidos, Alemania, Gran Bretaña, China y Japón), con
diversas condiciones en su manufactura y uso de energía. La gran diferencia es
la generación de electricidad, por medios que podrían ir desde carbón hasta
energía solar.
El resultado es que, considerando todo el ciclo de vida,
un vehículo eléctrico genera entre 25% y 71% menos emisiones que uno de
combustión interna. El menor margen de diferencia se reporta en China, un
país más intensivo en el uso de carbón para la generación de energía. El mayor
margen ocurre en Estados Unidos, un país que aún tiene una fuerte preferencia
por los grandes vehículos consumidores de gasolina.
Otra buena noticia es que esta ventaja tenderá a crecer en
el futuro. Hacia 2030, el mayor uso de tecnologías renovables en la generación
de energía disminuirá aún más la huella de carbono de los autos eléctricos. Por
ejemplo, Evergo ha instalado ya en República Dominicana electrolineras basadas
en energía solar. Esto sin contar los posibles adelantos tecnológicos en los
propios vehículos y sus baterías, que podrían consolidar a la electromovilidad
como una de las mejores estrategias ambientales del siglo XXI.
Urge una movilidad limpia
Vaya que urge acelerar el paso. De acuerdo con Carbon
Monitor, que busca medir en tiempo real estas emisiones, en 2023 el mundo
incrementó en 0.1% sus emisiones de dióxido de carbono, comparadas con el año anterior.
Según esta iniciativa, mientras EE. UU. redujo sus emisiones en 2.2% y la
Comunidad Europea logró un descenso de 5.1%, China las incrementó en 3%.
Por su parte, el estudio de Global
Carbon Project, impulsado por 90 instituciones del mundo encuentra un peor
resultado; las emisiones fueron de 40,900 millones de toneladas, un incremento
de 1.1%. De cualquier forma, el CO2 no está yendo en la dirección que busca el
Acuerdo de París. Hay que mencionar que, de acuerdo con ONU
Hábitat, el transporte genera 30% de los gases de efecto invernadero a
nivel mundial, y 18% corresponde a los automóviles particulares de combustión
interna.
Dados estos hechos, el incentivo para cambiar a una
movilidad más limpia es obvio, y los vehículos eléctricos están probando ser
una de las mejores alternativas que la humanidad tiene a la mano.
En México, de acuerdo con el Barómetro de Electromovilidad
de México, un informe preparado por la Electro Movilidad Asociación (EMA), la
infraestructura de recarga para vehículos eléctricos en México aumentó un 23%
en el segundo trimestre del año, alcanzando 39,257 posiciones. Este incremento
refleja un avance significativo en la adopción de la movilidad eléctrica en el
país, toda vez que de acuerdo con los datos más recientes del Instituto
Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), el consolidado de
autos eléctricos e híbridos conectables suma más de 64,124 unidades
comercializadas (del 1 de enero de 2016 al 31 de agosto de 2024).
PRODUCCIÓN, EXPORTACIÓN Y VENTAS DE AUTOS ELÉCTRICOS EN
MÉXICO DURANTE 2024
Si nos preguntamos cuántos autos 100% eléctricos ha producido México en 2024, la respuesta es que ya son 125,295 unidades de enero a agosto. De acuerdo con el análisis de Cluster Industrial y Directorio Automotriz, la proyección al cierre del año podría superar las 185 mil unidades, un récord considerando que en 2023 se produjeron 109,695 unidades. Es decir, tan solo en 2024 la producción de EV’s en México podría crecer un 69%, y desde 2020 a la fecha se habrían producido más de 430 mil vehículos eléctricos en el país.
La proyección crecerá de manera exponencial en los próximos
años, pues Stellantis, BMW, Audi, Volkswagen y otras marcas que están por
anunciar plantas armadoras en el país sumarán una producción importante de EV’s
Made In México. Hablando de exportación, nuestro país ha enviado al extranjero,
principalmente Estados Unidos, un total de 112,549 unidades entre enero y
agosto de 2024, se trata de vehículos eléctricos de General Motors, Honda y
Ford. Próximamente Stellantis comenzará a exportar la Jeep Wagoneer S eléctrica,
que ya inició producción en la planta de Toluca.
En lo que respecta a venta de vehículos eléctricos en México,
en 2023 las ventas totales fueron de 14,405 unidades. Entre enero y agosto
de 2024 dicha cifra ya fue superada, pues se han comercializado un total de
16,847 unidades. De acuerdo con las proyecciones de Directorio Automotriz, la
cifra debería superar con holgura las 20 mil unidades 100% eléctricas al cierre
del año, creciendo más de 45% contra el 2023.
Fuentes: Evergo, Directorio Automotriz, INEGI.