Detroit, Michigan, 3 de septiembre de 2024 (con información
de CBT News).- La UAW está logrando aumentos salariales y beneficios históricos
en las fábricas de proveedores Tier 1 de automóviles, inspirados en las
negociaciones hechas por el presidente del sindicato UAW, Shawn Fain.
El poderoso sindicato que logró aumentos salariales del 25% en los Big Three (Stellantis, GM y Ford) el año pasado, United Auto Workers (UAW), también está logrando aumentos salariales y beneficios sin precedentes en las fábricas de proveedores automotrices de nivel Tier 1; éxito que marca una victoria significativa para los trabajadores estadounidenses, pero genera inquietudes importantes entre los proveedores sobre el impacto financiero a largo plazo y su estabilidad. Al mismo tiempo, Shawn Fain se encuentra enfrascado en una guerra con el candidato republicano Donald Trump, llamándolo 'una costra' y pidiendo a los miembros de UAW en todo el país a votar por Kamala Harris, quien apoya el movimiento sindicalista.
En Michigan y otros estados de la unión americana, los
trabajadores de las plantas proveedoras, incluidas las principales empresas Tier
1 como Magna International y American Axle & Manufacturing, han obtenido
aumentos salariales que incluso duplican el típico aumento anual del 3%, superando
ampliamente la inflación. Además, el sindicato ha conseguido mejores beneficios
de salud y seguridad a la vez que ha aumentado las bonificaciones por firmar
contratos.
“Hemos luchado más duro que nunca”, dijo a CBT News, Waymon
Halty, vicepresidente de la UAW Local 155, que ha liderado estas negociaciones.
Los logros alcanzados no tienen precedentes, según Halty, y reflejan la
influencia de la directiva de Fain para negociar de forma más agresiva.
Sin embargo, a diferencia del acuerdo macro de la UAW con
los tres fabricantes de automóviles de Detroit, que cubre todas las ubicaciones
sindicalizadas, los acuerdos con los proveedores se negocian por cada planta.
Este enfoque, si bien es benéfico para los trabajadores, preocupa a algunos
ejecutivos de dichas empresas, pues muchos proveedores han estado luchando con
márgenes de ganancia estrechos y cambiantes de planta a planta debido a los
desafíos inherentes de la industria, incluidas las interrupciones de la cadena
de suministro y la lenta adopción de vehículos eléctricos o cambios de
programas por parte de los OEM, en algunos casos casi sin previo aviso.
Los ejecutivos de varios grandes proveedores de automóviles
han expresado su preocupación de que las negociaciones agresivas podrían llevar
a las empresas más allá de sus límites financieros, lo que podría llevar a la
pérdida de puestos de trabajo. “Alguien tiene que pagar por ello”, dijo un
líder sindical local, insinuando la posibilidad de reducciones de la fuerza
laboral.
Un ejemplo reciente es la planta de Lear Corporation en
Wentzville, donde los trabajadores obtuvieron un aumento salarial histórico del
30% después de una huelga de tan solo tres días. Mientras se alcanzaba el
acuerdo, el director ejecutivo de Lear, Ray Scott, destacó la presión que
ejerce sobre los proveedores el poder gestionar los crecientes costes
salariales. Scott indicó que la automatización sería clave para mitigar estos
costes, y que la empresa invierte mucho en ella para mantener la rentabilidad
de sus negocios.
El aumento de los salarios no es el único factor que impulsa
la automatización de las plantas proveedoras de autopartes. La escasez de mano
de obra sigue siendo un problema importante, ya que cada vez menos trabajadores
eligen empleos en fábricas en lugar de alternativas mejor remuneradas como centros
de distribución de Amazon u otras opciones de e-commerce. La automatización,
que a menudo se centra en las tareas más indeseables y repetitivas, se
considera una solución para mejorar las condiciones de las fábricas y atraer a
los trabajadores, especialmente a aquellos menos preparados entre una población
estadounidense cada vez más vieja.
A pesar de las ganancias salariales, la industria de autopartes
para automóviles de EE. UU. ha experimentado una disminución de los puestos de
trabajo. El número de trabajadores en la fabricación de piezas de vehículos de
motor en Michigan ha disminuido un 50% en los últimos 25 años, con tendencias
similares en todo el país, de acuerdo con CBT News. A medida que los mayores
costes laborales siguen presionando a la industria, se espera que se acelere el
paso hacia la automatización y la producción en países del extranjero como
México, cuya industria de autopartes ha ido en constante crecimiento tanto en valor
de producción como en inversiones y empleos. En
2024, se espera que México exporte más de 108 mil millones de dólares de
autopartes a los Estados Unidos, de acuerdo con estimaciones de la INA.
Si bien abogó por salarios competitivos, Halty reconoció la
necesidad de equilibrar la satisfacción de los trabajadores con la rentabilidad
de la empresa. 'No estoy tratando de sacarlos del negocio', dijo,
enfatizando la importancia de mantener una ventaja competitiva y al mismo
tiempo mantener felices a los empleados.