“Las autopartes reciben por sí solas más del 30% del total de la Inversión Extranjera Directa que llega al mercado automotriz mexicano. Es una oportunidad para impulsar a las Pymes del sector y acelerar su desarrollo”, dice Carlos González, director general de Hultek, empresa especializada en la proveeduría de piezas de hule para diferentes industrias.
En los últimos tres años, el catálogo de Hultek ha crecido significativamente para la industria automotriz, debido a la gran demanda que manifiestan las armadoras de autos tanto de México como de Estados Unidos.
El sector de autopartes anticipa que este año la IED será de 2 mil 300 millones de dólares, desde los 2 mil 100 millones de dólares de 2023.
Sin embargo, las proyecciones como la de Engen Capital señalan que la IED en autopartes podría superar los 8 mil millones de dólares al cierre de 2030.
“Para alcanzar esas cifras necesitamos que la industria en México madure de forma acelerada: se integren lo más pronto posible los procesos de automatización en las plantas y las certificaciones que se requieren para ser proveedor del sector”, explica González.
El especialista de Hultek señala que tanto la automatización como las certificaciones serán retos para más del 70 y del 85 por ciento de las Pymes, respectivamente.
Al comentar sobre si se trata de un objetivo alcanzable, González confía en que existe el mercado suficiente para poder triplicar la IED en los próximos años.
“Hay dos grandes razones que pueden llevar esto a la realidad para la industria de autopartes: en primer lugar, la electrificación, nos exige, al menos a algunos fabricantes Tier 3, piezas cada vez más ligeras, con composiciones y diseños de alta especificación y un mayor número de SKU’s”, comento el experto.
Por otro lado, señala González, será importante ver el desarrollo que tengan las armadoras de origen chino en el país. Actualmente, solo JAC Motor ensambla autos en México, mientras que otras firmas, como BYD y Chirey, han expresado su intención de contar con líneas productivas en México.
“La llegada de Tesla también traerá proveeduría china a México, por lo que para los proveedores y Pymes locales será fundamental impulsar el desarrollo de las plantas mexicanas para no dejar ir esta gran oportunidad de atraer nuevos clientes”, reconoció González.
Ante el incremento en ventas de vehículos eléctricos y de firmas de origen chino, Hultek también anticipa que el mercado aftermarket será importante para desarrollar en el país, aunque los autos no se ensamblen en México.
“Algunos fabricantes van a tomar la opción de contar con proveedores de piezas específicas en el mercado mexicano, aunque no cuenten con una planta de producción aquí. Será para atender al mercado de refacciones”, concluyó González.