• Alimentación y bebidas: 18%. A la cabeza de las estadísticas, los alimentos y las bebidas representan la mayor parte de los robos de carga. Su gran demanda, su carácter perecedero y su facilidad de venta en los mercados negros los convierten en objetivos de atracción.
• Bienes de construcción e industriales: 13%. Materiales como cemento, herramientas y maquinaria son blanco de los robos debido a su alta demanda en mercados tanto legales como ilícitos.
• Artículos diversos: 10%. Esta categoría incluye diversos bienes que no encajan en categorías específicas pero que tienen un valor significativo, lo que los hace atractivos para los criminales.
• Ropa y calzado: 6%. Los artículos de moda, aunque no son los más robados, siguen siendo importantes debido a su alto valor de reventa y su constante demanda.
• Autopartes: 5%. Las piezas de automóviles, especialmente los componentes de alto valor, son a menudo el objetivo debido a su potencial de reventa en los mercados legales y en los canales ilícitos.
• Metales 5%. Los metales son robados por su alto valor y su facilidad de liquidación, lo que afecta a los sectores que dependen de estos materiales.
• Remolques y camiones: 68%. La gran mayoría de los robos de carga en México afectan a remolques y camiones. Estas unidades son frecuentemente objeto de robo mientras están en movimiento o durante paradas temporales, a menudo cuando se dejan desatendidas o en áreas menos seguras.
• Unidades comerciales: 13%. Los vehículos comerciales, muy utilizados para el reparto y el transporte de corta distancia, también son blancos importantes, ya que transportan mercancías que pueden descargarse y revenderse rápidamente.
• Torton/Rabon: 12%. Los camiones Torton y Rabon, frecuentes en México para el transporte regional, representan una parte notable de los incidentes de robo.
• Contenedores: 3%. Los contenedores de carga, aunque con menor frecuencia son atacados, representan pérdidas sustanciales debido a la gran cantidad de mercancías que contienen.
• Tuberías: 3%. A pesar de ser relativamente poco frecuentes, cuando son robados provocan repercusiones considerables, sobre todo en proyectos de construcción e infraestructuras.
• Madrinas: 1%. En esta categoría se incluyen las unidades de transporte especializadas, que si bien es menos frecuente que sean sustraídas, siguen formando parte del panorama general de los robos.
En Tránsito: la mayoría, 74% de los robos de carga en México, ocurren mientras las mercancías están en tránsito. Este contexto proporciona numerosas oportunidades a los ladrones, quienes aprovechan las paradas inesperadas, las demoras en el tráfico y los momentos en que los vehículos quedan sin vigilancia, incluso si es por un breve periodo. Las rutas largas y aisladas son especialmente vulnerables, ya que dan a los delincuentes más tiempo y menos riesgo de ser detectados mientras cometen el robo.
Estacionamiento no vigilado: el 26% restante de este tipo de delitos se producen en estacionamientos sin vigilancia. Estos lugares presentan un alto riesgo debido a la falta de seguridad adecuada, que facilita a los asaltantes el acceso a la carga.
El robo de carga en México sigue siendo un reto para la cadena de suministro, lo que exige medidas de seguridad sólidas y multifacéticas. Al analizar los patrones de robo por tipo de producto, tipo de unidad y ubicación, las empresas pueden prepararse mejor y proteger sus activos. La mejora continua de la tecnología y la estrecha colaboración con las fuerzas del orden son esenciales para reducir el impacto del robo de carga y salvaguardar las cadenas de suministro en todo México.