Monterrey, Nuevo León, 05 de abril de 2024.- La más nueva de
las inagotables controversias en torno a la Gigafábrica de Tesla en Nuevo León llegó
con un reporte de Reuters, que aseguraba que tres fuentes confiables contaron
al medio internacional que el próximo modelo de nueva generación y precio
debajo de los 25 mil dólares del fabricante sería cancelado debido a la
competencia de las OEM chinas y sus precios más accesibles alrededor del mundo.
Reuters también aseguró haber tenido acceso a mensajes de la
compañía que confirmaban la decisión, la cual incluiría mantener el nuevo
modelo de tamaño compacto para el proyecto de robotaxis de Tesla. El a veces
llamado Model 2, entraría a producción a mediados de 2025 en la planta de Tesla
en Texas para luego producirse en la Tesla Gigafactory Mexico en Santa
Catarina, Nuevo León, proyecto que se encuentra en preparativos de infraestructura
y con permisos medioambientales aprobados desde hace meses.
Sin embargo, fiel a su estilo, Elon Musk publicó en X poco después del artículo de Reuters diciendo que 'Reuters está mintiendo (otra vez)'. Aunque sin ahondar en detalles. Las acciones de Tesla cayeron más de un 6% tras el informe de Reuters, pero recuperaron parte de la pérdida tras la publicación de Musk. Por la tarde del 05 de abril, Musk publicó en X que 'Tesla Robotaxi será revelado el 8/8', es decir el 8 de agosto de 2024. En respuesta a un usuario de la red social que indicó la posibilidad de que el proyecto vaya tan avanzado que Tesla ha decidido invertir más recursos en el robotaxi pues será un mucho mayor éxito que el Model 2, Musk solo respondió con un emoji de dos ojos.
Dos fuentes de Reuters dijeron que se enteraron de la decisión de Tesla de desechar el Model 2 en una reunión a la que asistieron decenas de empleados, y una de ellas dijo que la reunión tuvo lugar a finales de febrero. 'La directiva de Elon es apostar por el robotaxi', dijo esa persona a Reuters.
Los mensajes de Tesla mencionados por Reuters incluyen uno
del pasado 1 de marzo, en el que supuestamente un Program Manager del nuevo
modelo discutía la desaparición del proyecto con el personal de ingeniería y
les aconsejaba que no informaran a sus proveedores 'sobre la
cancelación del programa'. Muchos de estos proveedores ya han
invertido en México, se encuentran construyendo plantas o ya las han
inaugurado.
Los planes para el modelo “barato” de Tesla se han
considerado clave para cumplir las ambiciones de Musk de vender 20 millones de
vehículos para el año 2030, el doble de lo que vende hoy el mayor fabricante de
automóviles del mundo, Toyota. Si la muerte del Model 2 llegara a
confirmarse, no está claro cómo llegaría a dicha meta.
Tesla llamó al proyecto de automóvil de nueva generación con
el código NV91 internamente y H422 externamente al discutirlo con sus
proveedores, según dos de las fuentes y mensajes de la compañía revisados por
Reuters. Los mensajes del director del programa Tesla a los empleados hacían
referencia a esos nombres en clave al discutir la terminación del proyecto. Uno
de esos mensajes enviado el 1 de marzo decía que “los proveedores
deberían detener todas las actividades adicionales relacionadas con el
H422/NV91”. En otro mensaje del 1 de marzo, el gerente agradeció al
personal de ingeniería por sus esfuerzos y los instó a documentar lo que habían
aprendido.
'Me gustaría agradecer a todos por todo su arduo
trabajo y dedicación para superar los límites y ejecutar el mejor diseño
posible dadas las agresivas limitaciones con las que tuvimos que trabajar',
decía el mensaje. 'No queremos que todo nuestro arduo trabajo se
desperdicie, por lo que es importante que atemos las cosas y las documentemos
adecuadamente'.
Mientras Tesla ha pasado por una montaña rusa en los últimos
años, BYD ha visto dispararse sus ventas de vehículos eléctricos en China,
pasando de alrededor de 130,000 a más de 1.5 millones, sin incluir su
próspero negocio de híbridos enchufables ni sus exportaciones de rápido
crecimiento.
BYD ya ofrece una gran cantidad de modelos de gama baja y
media, incluido su hatchback Dolphin Mini por menos de 360,000 pesos en el
mercado mexicano. Y con una planta de 100 a 150 mil unidades planeadas
para iniciar construcción en el centro del país en este 2024, que podría abaratar
los costos de dichos modelos aún más, el plan de Tesla y otras marcas para
ser uno de los cinco fabricantes líderes en ventas en México pareciera
alejarse.
Supongamos por un momento que el nuevo modelo de Tesla en
efecto sea cancelado. Existen dos posibilidades:
1) Tesla continúa con los planes para construir su
Gigafactory México dedicándola a otros modelos que son más competitivos en
su segmento, ya sea escalando el esquema de la fábrica o modificándolo (lo cual
podría explicar los retrasos que ha sufrido el inicio de construcción de la gigafábrica).
2) La compañía de Musk cancela la Gigafábrica en Nuevo
León, tirando millones de dólares de la compañía, de proveedores y de
autoridades a la basura.
Por supuesto, la mejor opción para el país sería la
primera, pero sin información oficial de por medio, la posición del
Gobierno de Nuevo León respecto a que el inicio de construcción de la planta es
inminente sigue siendo la última noticia fiable al respecto.
Si hay algo que Elon Musk ha demostrado es ser necio con sus
ambiciones, por lo que los sitios en México y recientemente en India, muy probablemente
lleguen a hacerse realidad, aunque sean bajo objetivos distintos a los
iniciales. Al fin, habrá que esperar, aunque quizás para cuando tengamos
una certeza respecto a Tesla, sus competidores chinos BYD, MG Motor, Chirey u
otro fabricante ya se les hayan adelantado.
Redacción: Adrián Martínez, Cluster Industrial.
Nota: Las opiniones y fuentes consultadas por Reuters no
representan la opinión de los editores de Cluster Industrial. Dicha información
es responsabilidad del medio señalado.