CDMX, 05 de marzo
de 2024.- El autotransporte de carga es una industria que ha evolucionado
positivamente durante la última década. Ha crecido 2.8% en 2023 y sus
expectativas son positivas a mediano plazo, favorecidas por el comercio interno
y externo. De acuerdo con los analistas de Engen Capital, el nearshoring la va
a impulsar aún más.
La industria
ha crecido por encima del promedio
Su valor de
producción (tamaño de su mercado) en 2023 habría sido de USD 98 mil millones
estimados. Alrededor de 56% de los bienes transportados en el país se realizan
por este medio, sin esperarse cambios significativos (es un indicador
estructural). Es la novena industria más importante (PIB de USD 67 mil millones
en 2023) representando 3.8% del PIB nacional, su máximo histórico, y 52% del
PIB de transportes y almacenamiento.
En la última
década, su ritmo ha sido más dinámico que el promedio nacional. Durante
2014-2023 su PIB creció 3.3% promedio anual, por arriba del 1.4% para el
nacional. En 2023 creció 2.8%, ligeramente por debajo del 3.2% del PIB general.
En 2024 crecería 1.8%. Sus drivers son: comercio interno y externo, inversión
en infraestructura, economía general. Hoy emplea a poco más de un millón de
personas y su nivel de productividad es casi 50% superior al promedio nacional.
Es una industria con buen desempeño reciente y con buenas expectativas a
mediano plazo. Será beneficiada por el nearshoring, que demandará mucha
transportación para el comercio interno, así como para trasladar los productos
hacia Estados Unidos. El T-MEC lo beneficia.
El INEGI genera
estadísticas sobre los ingresos del autotransporte de carga a nivel de dos
segmentos: carga general y especializada. El primero incluye carga empacada o
suelta en camiones, cajas, remolques, contenedores y otras formas, sean
agrícolas o no agrícolas. En ambos casos puede ser carga local (metropolitana)
o foránea (interestatal o al extranjero).
El segundo
(especializada) se refiere a mudanzas, materiales de construcción, residuos
peligrosos, maquinaria pesada, refrigerados, entre otros. En la coyuntura
reciente, los ingresos de la industria de autotransporte de carga observan
desempeños diferenciados. Por un lado, el de carga general reporta caídas por
once meses consecutivos. Tras crecer 7.0% real durante 2022, en los meses
recientes observa caídas significativas (-12.0% anual en diciembre), de manera
que durante todo 2023 retrocedió 9.6%, similar al -9.8% de la crisis de 2020.
Es inusual, ya que en medio de un crecimiento de la economía de 3.2%, esta
industria cayó.
Por su parte, los
ingresos para carga especializada siguen al alza. Tras crecer 8.4% durante
2022, su avance fue de 5.2% en 2023. Sus actuales ingresos están por encima de
la prepandemia y sus expectativas son positivas.
A diciembre de
2023, el portafolio de la banca comercial en autotransporte de carga era de MXN
57 mil millones, reportando un repunte de 29.6% real anual, su mejor ritmo
desde mediados de 2016. Por cuarto año consecutivo, el ritmo del crédito a esta
industria es bastante superior a la media nacional: logró repuntar 15.7% real
durante 2023 vs solamente 1.1% de la media. En general, el crédito comercial
observa dificultades para crecer.
El buen ritmo de
los años recientes ha permitido una leve ganancia en el peso del crédito a esta
industria con respecto al total nacional, desde 0.9% en 2019 hasta 1.2% en
2023. Es una proporción muy baja, considerando que el PIB de esta industria
representa ahora 3.8% del PIB nacional. Por ello, es una industria con muy bajo
grado de apalancamiento: su crédito representa solamente 3.9% de su propio PIB,
muy por debajo de su correspondiente apalancamiento nacional (12.4%).
La industria usa
poco financiamiento para crecer, lo que va en línea con el hecho de que la
industria es poco intensiva en inversión. Por ello, habría un potencial para
que las instituciones financieras aumenten su exposición crediticia en esta
industria, sin que represente un gran riesgo para aquéllas. Por las propias
características de esta industria (hombre-camión), su apalancamiento seguirá
siendo bajo. Su cartera vencida es baja y se ubica por debajo de 2%.
Fuente: Engen Capital.