CDMX, 17 de octubre de 2023.- CIAL Dun & Bradstreet
presentó su más reciente edición del monitor económico en el que destacan la
aparente pausa en la inflación hacia el cuarto trimestre del 2023, así como una
caída en las ventas manufactureras y una generación de empleos moderada. A
continuación, los detalles:
Inflación haría una pausa en el cuarto trimestre
En algunos países, la inflación presenta un cambio de
dirección. Por ejemplo, en Estados Unidos se ha elevado desde el 3.0% anual en
junio hasta 3.7% en septiembre, generando cierta preocupación sobre su futuro
próximo y hasta cierta incertidumbre sobre los mercados financieros. En Brasil,
la inflación se ha elevado de 3.2% anual en junio hasta 5.2% en septiembre,
rompiendo una racha de descensos desde el año pasado. En la Eurozona y en el
Reino Unido la inflación sigue manteniendo su tendencia a la baja, aunque se
modera hoy con respecto a los meses anteriores.
En México, la inflación mantiene su tendencia descendente y
se ubicó 4.45% anual en septiembre, su tasa más baja desde principios del año
2021. Aunque el descenso está siendo un poco más moderado que en los meses
previos, la parte positiva es que su componente subyacente, que pesa 76% de la
canasta del INPC, se ubica ahora en 5.76% anual y desciende más rápido de lo
previsto inicialmente. Por su parte, su componente no subyacente se ubicó en
0.60% anual y podría empezar con sus ciclos ascendentes.
El cuarto trimestre podría representar una pausa para la
inflación. Existe cierto consenso entre los analistas sobre una posible
elevación de la inflación en el resto del año, cerrando alrededor de 5.7%,
según la encuesta de Citibanamex a los analistas financieros. Se estima un
incremento de 4.5% y un posible descenso a 3.9% en 2024. Un dato importante es
que, durante 2001-2022, la inflación local ha promediado alrededor de 4.5%
anual. En este momento, la inflación está al nivel de su promedio histórico, lo
que significa que Banxico no tendría que forzar más de la cuenta para que la
inflación baje a su meta de 3%.
Se modera la generación de empleos en el país
Al mes de septiembre estaban registrados en el Instituto
Mexicano del Seguro Social (IMSS) 22.13 millones de trabajadores, su máximo
histórico. De este total, 19.06 millones (86.1%) están en la categoría de
permanentes y el resto son eventuales. Los asegurados totales crecieron 3.4%
anual, una tasa aún importante, aunque se aprecia cierta moderación con
respecto al año pasado. A nivel de sus segmentos, el ritmo ha sido de 2.9%
anual en los permanentes y 6.6% en los eventuales.
Por su parte, en septiembre se generaron 132,558 nuevos
puestos de trabajo, su nivel más bajo en este mes desde 2018 (sin considerar la
crisis de 2020). Asimismo, se han generado poco más de 720 mil nuevos empleos
anuales (de octubre de 2022 hasta septiembre de este año), lo que ha significado
una caída de 11.6% anual en esta métrica. Claramente estamos viendo una menor
generación de empleos, lo que se explica porque la economía está ingresando a
una fase de desaceleración, sin llegar a una recesión.
Al cierre de este año, se estima que se generarán un total
de 641 mil nuevos empleos, propiciando 14.8% de empleos menos que los 753 mil
puestos de 2022 y ligando dos años consecutivos a la baja. En la última década
(2014-2023), el país solo ha generado 528 mil empleos privados formales (promedio
anual), mismo que se ha dado en condiciones de un crecimiento de la economía
por debajo del 2.0% al año. Por ello, es indispensable que el PIB crezca 4.0% o
más cada año, a fin de generar los más de 1.2 millones de empleos que demanda
el mercado laboral. Sería la única manera de reducir la informalidad laboral,
que hoy en día se ubica en alrededor de 55% de la población económicamente
activa.
Buen desempeño de los salarios reales
Al mes de septiembre, el salario base de cotización al IMSS
se ubicaba en 532.2 pesos por día, reportando un incremento de 6.0% real anual.
En el último año, la inflación descendió de 8.7% anual en septiembre de 2022
hasta 4.5% en septiembre de este año. El aumento nominal de los salarios IMSS
se ha mantenido alrededor de 11% anual a lo largo de este periodo, por lo que,
ante la menor inflación, el efecto directo se sintió sobre el salario real. El
actual ritmo de 6.0% real anual es el mejor en más de dos décadas y solo ha
sido superado una vez, en febrero de 2002, con un margen de 6.1%.
En el balance de este año, estos salarios crecerían 5.2%
real. En las últimas tres décadas, estos salarios crecieron por encima de este
ritmo solo en dos ocasiones: 10.9% real en 2000 y 5.5% en 2001. El próximo año,
estos salarios crecerían 4.1% real. Como referencia: en estas tres décadas, los
peores momentos para estos salarios fueron en 1995, cuando perdieron 15.6%
real, así como en 1996 (-11.0%). Finalmente, los salarios contractuales totales
del país crecerían 3.1% real anual en este año, su mejor registro en más de
tres décadas. El salario mínimo de este año reportaría un incremento de 20%
nominal y con un avance de 13.7% real, su mejor ritmo desde 2020.
Balanza comercial por países y viajeros internacionales
La guerra comercial iniciada en 2018 entre Estados Unidos y
China (restricciones y aranceles) ha generado una mayor dinámica comercial de
México con EE. UU. Nuestras exportaciones siguen creciendo y han generado un
superávit comercial histórico, estimándose en 234 mil millones de dólares para
este año, su máximo histórico. La entrada de nuevas inversiones a México,
producto de la relocalización de las empresas, podría incrementar aún más este
superávit. Por su parte, México reporta un fuerte déficit comercial con China,
que en este año sería de casi 104 mil millones de dólares. Asimismo, el déficit
comercial con Europa ha sido creciente y en este año alcanzaría unos 45 mil
millones de dólares.
En agosto ingresaron al país 2,132 millones de dólares por
viajeros internacionales, con una caída de 3.6% anual y ligando dos meses
consecutivos a la baja. Debido a esto, se observa un cambio de dirección en
esta variable, ya que a principios de año crecía a tasas elevadas y se da en
condiciones de una fuerte apreciación del tipo de cambio y de otros factores.
En este año, ingresarán al país alrededor de 31 mil millones de dólares por
este rubro, creciendo 10.5%. Tras el desplome de 2021, la entrada de divisas
por este segmento ha retomado su tendencia histórica.
Continúa la caída de las ventas manufactureras
En agosto, mientras la producción física manufacturera cayó
0.7% anual, sus ventas nominales retrocedieron 5.8% anual, ligando seis meses
consecutivos a la baja. Así como este sector fue el primero en salir de la
crisis de 2020, ahora es el primero (a nivel de los grandes sectores del país)
que muestra una tendencia a la baja (en volumen y en valor nominal).
Su caída de agosto es la mayor desde hace una década,
descontando la caída de la crisis de 2020. En lo que va del año, estas ventas
cayeron 1.9% anual, destacando que 13 de las 21 industrias que la conforman
observan tasas negativas. Cinco industrias muestran caídas significativas, mientras
que el equipo de transporte concentra 29.4% de las ventas manufactureras y ha
crecido 6.0% anual en lo que va del año. La alimentaria pesa 15.7% y creció
5.1% anual.
El sector industrial reportará en este año un valor estimado
de su Producto Interno Bruto (PIB) de casi 578 mil millones de dólares y siendo
equivalente a 32.2% del PIB nacional. Está conformado por cuatro subsectores:
la minería, que pesa 10.5% del PIB industrial, el eléctrico (5.0%), la
construcción (20.1%) y las manufacturas (64.4%). Claramente, las manufacturas
determinan la trayectoria del sector industrial.
En la última década, el peso de las manufacturas ha mejorado
significativamente, desde 56.3% del PIB industrial en 2013 hasta el actual
64.4%. La minería ha perdido mucho peso, al pasar desde 21.1% del PIB
industrial en 2013 hasta solo 10.5% una década después.
En la coyuntura reciente, el sector industrial está
creciendo a tasas elevadas, con 5.0% anual en agosto, superando a lo largo del
año las expectativas del mercado. Las manufacturas, su principal componente,
retrocedieron 0.7% anual en agosto, observando una tendencia descendente. Hace
un año crecía al 7.1% y ésta es su primera tasa negativa desde principios de
2021. Es una industria que resiente los efectos de un bajo desempeño de la
producción industrial en Estados Unidos.
Por otro lado, la construcción reporta ahora un desempeño
inusitado y extraordinario. Creció 30.1% anual en agosto, una tasa que no había
visto en varias décadas, descontando los rebotes postcrisis de 2020 y 1995.
Durante el periodo enero-agosto de este año, la construcción creció 14.8%
anual, estimándose una tasa alrededor de 15.6% para todo el año. Los tres
grandes proyectos del gobierno, así como las obras del sector privado, están
creciendo a tasas elevadas. El nearshoring está generando más obras
industriales y de infraestructura, beneficiando a otras industrias de la
economía. De esta manera, en este año, el sector industrial crecería alrededor
de 3.6% a comparación del 3.0% de la economía nacional.
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