El decreto, publicado en el Diario Oficial de la Federación, incluye estímulos fiscales que consisten en la deducción inmediata de la inversión en bienes nuevos de activo fijo y la deducción adicional de gastos de capacitación. Los contribuyentes podrán aplicar este estímulo fiscal durante los ejercicios fiscales de 2023 y 2024, siempre y cuando al menos el 50% de sus ingresos provenga de la exportación de bienes en cada ejercicio.
La deducción inmediata de la inversión en bienes nuevos de activo fijo se extiende hasta el 31 de diciembre de 2024. Esto implica que las empresas podrán deducir, en el ejercicio en el que se realice la inversión, un porcentaje que varía entre el 56% y el 89% del monto original de la inversión de automotores eléctricos.
Este decreto reconoce la importancia de diversos sectores clave, entre los que se incluyen el sector automotriz, con un enfoque especial en la electromovilidad. También se benefician industrias como la de semiconductores, eléctrica y electrónica, dispositivos médicos y farmacéuticos, así como la agroindustria y la alimentación humana y animal.
El decreto impacta de forma positiva a Nuevo León, estado que se consolida como hub de la electromovilidad en Latinoamérica, ya que durante la administración de Samuel García se han confirmado 45 proyectos en el sector automotriz, de los cuales el 62% pertenecen al ámbito de la electromovilidad. Además, en 2023, el 30% de las inversiones totales se destinan a este sector en crecimiento.
Pero al mismo tiempo impulsa la transición hacia una movilidad más sostenible en el país que, según expertos, durante el Foro de Electromovilidad realizado en Industrial Transformation México 2023, la nación tiene todas las oportunidades de cortar la brecha eléctrica con Europa y Estados Unidos, con el apoyo del Gobierno federal.
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