León,
Guanajuato, 19 de septiembre de 2023.- La descarbonización se ha posicionado
como un objetivo estratégico para diversos sectores industriales desde hace
varios años, y tiene un rol cada vez más central en los procesos de crecimiento
y desarrollo, sin embargo, para que puedan alcanzarse, mantenerse, y
expandirse, deben ir acompañados por innovación tanto tecnológica como en los
modelos de negocios.
Iberdrola
México, tras más
de 20 años trabajando con miles de clientes en una muy amplia diversidad de
sectores industriales, ha logrado identificar y entender las necesidades y
oportunidades específicas del mercado y ha trabajado fuertemente para
desarrollar otras soluciones y modelos de negocio en beneficio de las empresas
del país.
Smart
Solar, por ejemplo, permite a las empresas el aprovechamiento de los muchos
beneficios de un sistema fotovoltaico instalado en sus propias instalaciones, y
sin la necesidad de ejercer fuertes inversiones para lograrlo.
Bajo este
modelo desarrollado por Iberdrola, las empresas pueden instalar sistemas fotovoltaicos
en áreas no aprovechadas de sus instalaciones, y de esta forma, acceder a
energía generada en su mismo sitio de operación, reducir sus emisiones
contaminantes, y también, acceder a precios de energía mucho más competitivos,
logrando una mejora en la eficiencia de sus procesos.
Una de las
ventajas competitivas más importantes de este modelo es que Iberdrola asume los
riesgos tecnológicos y financieros asociados al diseño e implementación del
sistema fotovoltaico, por lo cual, las empresas pueden continuar concentradas
en su negocio, mientras se benefician de una mejora sustancial en la
eficiencia, y se encaminan hacia la descarbonización.
Smart Solar permite salvar algunas de las
barreras de adopción de los sistemas fotovoltaicos más comunes entre las
empresas privadas: los riesgos tecnológicos y financieros.
Además de
innovar en modelos de negocio que permiten a la industria beneficiarse de las
energías renovables, y encaminarse a operar de formas más sostenibles,
Iberdrola está trabajando en el desarrollo de soluciones que permiten aplicar
innovaciones tecnológicas en atender otras necesidades de la industria de
formas sostenibles.
En este
sentido, Iberdrola está invirtiendo en el desarrollo de proyectos para la
obtención de hidrógeno verde, es decir, con cero emisiones de dióxido de
carbono.
El
hidrógeno es el elemento más abundante en la Tierra, es un combustible
universal, y tiene muy diversas aplicaciones en la industria y el transporte,
sin embargo, los procesos industriales empleados hasta el día de hoy para
obtenerlo son poco sostenibles.
Iberdrola
propone el hidrógeno verde como una alternativa innovadora, sostenible, y
alineada con los objetivos de transición energética. Durante el proceso para
obtenerlo no se emite dióxido de carbono al ambiente debido a que se lleva a
cabo mediante la electrólisis.
La
electrólisis es un proceso conocido, que emplea justamente energía eléctrica
para separar las moléculas de hidrógeno y oxígeno presentes en el agua, el
hidrógeno verde se obtiene sin emisiones dado que el 100% de la energía que
requiere la electrólisis proviene de fuentes renovables, como sistemas fotovoltaicos.
El
hidrógeno que se obtiene puede ser almacenado con facilidad, y transportado
usando la misma infraestructura empleada para la distribución del gas natural,
mientras que el oxígeno puede ser liberado directamente a la atmósfera, o
utilizarse en otros procesos industriales, dependiendo de las características
de cada proyecto.
Actualmente,
Iberdrola está desarrollando diversos proyectos de hidrógeno verde en Europa y
Asia, tanto para procesos industriales, como en proyectos de movilidad, en los
cuales el hidrógeno verde permite reducir a cero las emisiones no solamente en
el proceso de obtención, sino directamente en las ciudades y regiones donde se
emplea como combustible para el transporte público.
La
descarbonización de la industria requiere de innovación constante, tanto en
términos tecnológicos, como en el desarrollo de modelos que permitan que los
objetivos de transición energética no solo sean deseables para las empresas,
sino que acompañen sus propios procesos de innovación, y crecimiento
sostenible.