El Consejo Empresarial Mexicano, advierte que la estabilidad económica debe ser una prioridad en el próximo presupuesto, ya que en México se han presentado serios desequilibrios financieros y crisis debido a errores de cálculo, irresponsabilidad y malos manejos en los presupuestos y su macroeconomía en los últimos años de algunos sexenios en los años 70s, 80s y 90s.
México llega a este presupuesto en un entorno de creciente gasto publico ya comprometido e insuficientes recursos fiscales para respaldarlos, advierte el organismo. El gasto público se ha incrementado año con año en este sexenio, así como el déficit fiscal con respecto al PIB, el cual podría llegar al 3.7% en el presente año.
Por lo anterior, se debe exigir a los legisladores mexicanos establecer candados para que el Gobierno Federal no pueda adquirir más deuda y vigilar que el gasto se ejerza con base en un eficiente uso de los ingresos derivados de recaudación fiscal, reconociendo y confirmando que debe respetarse la legislación que debe cumplir el único órgano autorizado para su vigilancia que es la Auditoría Superior de la Federación, estableció el CEM.
Adicionalmente se advierte que existe una reducción en las reservas y un mayor gasto en efectivo hacia proyectos sociales con evidente intencionalidad política que cada año ha venido en aumento, lo que a todas luces hace vulnerable el ejercicio presupuestal.
Además, en el caso de una desaceleración en el entorno económico internacional, ésta podría reducir el ingreso fiscal del gobierno, por lo que el buen manejo del presupuesto debe ser trascendental el próximo año, en especial ante la exigencia de incrementos en el costo de pensiones, jubilaciones y el desmedido aumento de la deuda pública.
Cabe destacar que datos de la Secretaría de Hacienda revelaron que al mes de junio de 2023, el Gobierno Federal aumentó su deuda neta en 19.6% en términos reales, con lo que ésta ascendió a 11,919 billones de pesos.
El Consejo Empresarial Mexicano, presidido por Juan Carlos Pérez Góngora, concluye que el paquete económico 2024 debe considerar este entorno y buscar mantener la estabilidad en el gasto y el déficit fiscal, además de impulsar la inversión y la actividad productiva y comercial de los mexicanos, en especial la generada por las pequeñas y medianas empresas, que contribuyen en un alto porcentaje al empleo en el país.
Sin dejar de atender las principales necesidades de la población, como son salud, seguridad, y educación, la cautela en el manejo de los recursos es, ahora más que nunca, un reto fundamental que el ejecutivo y el legislativo deben considerar en las próximas semanas, para evitar riesgos para la economía del país al tiempo de impulsar la actividad productiva nacional.