Shawn Fain, presidente del sindicato representante de los trabajadores de la industria automotriz estadounidense, afirmó que la responsabilidad de la huelga recae en los tres principales fabricantes de automóviles del país.
'Nuestras prioridades son claras, las compañías pueden asumirlas y queda mucho tiempo para que los tres grandes se pongan a negociar en serio', agregó Fain en referencia a las tres compañías automotrices.
Si los trabajadores votan a favor de la convocatoria de huelga, esta podría comenzar cuando expire el actual convenio colectivo el 14 de septiembre próximo.
Las negociaciones entre UAW y los tres gigantes automotrices estadounidenses comenzaron a mediados de julio, buscando un nuevo acuerdo colectivo.
El sindicato está demandando un aumento salarial gradual de hasta el 46% durante los próximos cuatro años, además de otras demandas como la inclusión en UAW de los trabajadores de las plantas de producción de baterías para vehículos eléctricos.
Fain también agradeció al presidente de EE. UU., Joe Biden, por su declaración en apoyo a un acuerdo 'justo' que incluya 'buenos salarios' y garantice el derecho de sindicalización de los trabajadores.
'En este momento crítico para las negociaciones, agradecemos que el presidente Biden apoye convenios fuertes que aseguren puestos de trabajo sindicalizados con buenos salarios y que permitan una transición justa hacia un futuro de vehículos eléctricos', comentó Fain.
El presidente de UAW resaltó que, en la última década, los beneficios acumulados por las tres grandes compañías en Norteamérica ascienden a 250 mil millones de dólares y solo en la primera mitad de este año a 21 mil millones de dólares.
'Con el respaldo del presidente, sabemos que esos beneficios pueden ser invertidos en convenios colectivos que mejoren la situación de los trabajadores, nuestras familias y comunidades', concluyó Fain.