Toyota invierte 338 MDD en Brasil para producir nuevo auto híbrido que usa etanol

SAO PAULO, Brasil, 20 de abril (con información de Reuters y Toyota Motor Corp).- Toyota Motor Corp anunció una inversión de $1,700 millones de reales brasileños (unos $338 millones de dólares) para fabricar un nuevo modelo de automóvil compacto híbrido de combustible flexible en Brasil, esto quiere decir que funcionará con gasolina y etanol además de su motor eléctrico.

El fabricante de automóviles japonés ha estado apostando fuerte en este segmento del país sudamericano, ya que la mayoría de los automóviles nuevos en Brasil pueden funcionar con etanol al 100%. En 2019, Toyota lanzó su primer vehículo híbrido de combustible flexible de Brasil, una versión de su sedán insignia, el Corolla, que también usa tanto gasolina como etanol.

Sus rivales en la región, Stellantis y Volkswagen también están invirtiendo en la tecnología de combustible flexible y motorización híbrida, en contracorriente a lo que están haciendo las armadoras estadounidenses General Motors y Ford, que se han centrado en autos completamente eléctricos para el país sudamericano.

El anuncio de Toyota se dio en un evento al que asistieron el presidente local de la firma, Rafael Chang, y el gobernador de Sao Paulo, Tarcisio de Freitas. Parte de la inversión -aproximadamente 199 millones de dólares- provendrá de créditos fiscales que Toyota tenía con el Estado de Sao Paulo.

'Toyota cree en el mercado brasileño y continúa invirtiendo en tecnología e innovación para satisfacer las necesidades de los consumidores', dijo Chang. “Es una solución sostenible que además crea empleo y desarrollo económico”.

El gobierno del estado de Sao Paulo dijo en un comunicado que los motores del nuevo auto compacto, cuyo nombre no fue revelado, se fabricarán en la planta de Toyota en Porto Feliz, generando más de 700 empleos.

El automóvil se lanzará en Brasil para 2024 y se espera que su venta se extienda a un total de 22 países de América Latina, de acuerdo con Reuters. Esto indica que podría llegar a México, donde el 80% de los vehículos es compatible con etanol E10 como combustible, aunque su uso es mucho menor que en el país sudamericano.