CDMX, 3 de octubre del 2022.- En la nueva edición del
Monitor Económico de CIAL Insights, se destaca que los estados del Noreste
(Coahuila, Chihuahua, Nuevo León y Tamaulipas) continúan como las principales
entidades exportadoras del país, con el 27 por ciento del total nacional hacia
agosto de 2022. A continuación, más detalles del clima económico actual de
México.
Las exportaciones mantienen un
sólido ritmo
Mientras la economía de Estados Unidos sostenga cierto
ritmo, es muy probable que nuestras exportaciones sigan al alza. La producción
industrial de Estados Unidos creció 3.7% anual en agosto, aunque muestra cierta
tendencia hacia la desaceleración. Las exportaciones totales de México
crecieron 25.2% anual en agosto, una tasa muy elevada que confirma la rápida
salida de este segmento de la economía de la crisis de 2020. En lo que va del
año, crecieron 18.9% anual, un gran desempeño, considerando que en todo 2021 su
avance fue de 18.6%.
Las exportaciones petroleras crecieron 19.7% anual en
agosto, reportando una fuerte moderación con relación a los meses previos. Ésta se atribuye a la reducción de los precios internacionales
del petróleo. La mezcla mexicana pasó de 107 (en mayo) hasta 87 dólares por
barril, en agosto. En lo que va del año, estas exportaciones crecieron 50.3%
anual.
Las no petroleras, que representan más de 94% del total
exportado, también observan un gran desempeño. Crecieron 17.0% anual en lo que
va del año. Lo más destacado, en todo este segmento, es que este tipo de
exportaciones (pesan 88% del total) incrementaron 17.8% anual en lo que va de
2022. Casi el 84% se destina a Estados Unidos, representando un crecimiento de
18.8% anual, en lo que va de este año.
También destaca el hecho de que las exportaciones automotrices y no
automotrices muestran un mejor desempeño. En este año, las exportaciones
totales ascenderían a casi 578 mil millones de dólares.
En agosto, el
crédito de la banca múltiple reportó un crecimiento de 2.4% real anual, ligando
cinco meses consecutivos con tasas positivas. El cambio de dirección del
crédito es evidente, aunque está siendo más lento que el previsto a principios
de año, porque la inflación repuntó hasta 8.7% anual en agosto —tres puntos más
que hace un año—. La prueba es que, el incremento nominal fue de 11.3% anual,
su mejor número desde el cuarto trimestre de 2018. Si la inflación estuviera
como en el pasado reciente, alrededor de 4%, el crédito estaría creciendo más
de 6% real, que sería un ritmo aceptable, en condiciones en que el ritmo de
nuestra economía ha sido no más del 2% anual en las últimas décadas.
A nivel de los tres
segmentos del crédito, el dirigido al consumo muestra un mejor desempeño, con
4.5% real anual en agosto, pesando 16% del portafolio total. Crece pese al
difícil entorno inflacionario y de las tasas de interés, pero se apoya por la
generación de empleos que aún se observa en la economía. El hipotecario (pesa
20% del portafolio) mantiene cierta estabilidad en su ritmo, al crecer 3.8%
real anual en agosto. Finalmente, el comercial, que pesa 64% del total,
creció solamente 1.2% real anual, una tasa más baja que la anticipada.
Una nota positiva es que, a pesar del entorno económico
complejo, la cartera vencida mantiene una tendencia a la baja, tras el alza
temporal de enero a causa de un cambio metodológico por parte de la Comisión
Nacional Bancaria y de Valores (CNBV). Ésta se ubicó, en agosto, en niveles de
2.27% del portafolio. Por 17 años consecutivos (2006-2022), la cartera vencida
del sistema se ubica por debajo de 3%. Previamente había estado en 4.5% en 2005
y su máximo histórico fue de 33.5% en 1999, cuando se reflejaba la parte más
aguda de la crisis económico-financiera de 1995.
Finanzas públicas aún bajo
control
Aunque se percibe un entorno local y externo complejo, las
finanzas públicas del país se mantienen en orden. En lo que va del año (cifras
de enero-agosto), los ingresos del sector público crecieron 4.4% real anual,
que se suma al 5.6% observado en 2021. Lo anterior significa que los ingresos
siguen creciendo a una tasa aceptable, mientras la economía se desacelera. Sin
embargo, hay mucha volatilidad en los ingresos, especialmente en los
tributarios (pesan más de 60% de los totales), mismos que cayeron 10.9% real
anual en agosto y han acumulado una leve caída de 0.3% anual, en lo que va del
año.
A nivel de los tributarios, en lo que va del año, el
impuesto sobre la renta y al valor agregado avanzaron 14.8% y 2.7% real anual,
respectivamente, lo que es positivo en medio de la desaceleración. Un tema que
merece especial referencia es el impuesto especial sobre producción y servicios
en gasolina y diesel (IEPS), que en este año reporta un negativo de más de 84
mil millones de pesos (efecto del subsidio) versus los +170 mil millones
de hace un año. Claramente, el intento del gobierno de controlar la inflación
vía los subsidios a las gasolinas ha significado un sacrificio de más de 150
mil millones de pesos en un año. Por su parte, los ingresos no tributarios
totales crecieron 12.5% real, beneficiados por los ingresos petroleros.
Mientras los ingresos crecieron 4.4% real anual en lo que va
del año, los gastos lo hicieron 3.2%, indicando que las finanzas públicas se
mantienen en orden. El gasto corriente y de capital crecen moderadamente,
mientras que el costo financiero (efecto de las mayores tasas de interés
internas y externas) y los Adeudos de Ejercicios Fiscales Anteriores (Adefas)
crecen 8.1% real. De esa manera, se estima que el déficit fiscal de este año
sería equivalente a 3.0% del PIB, similar a la previsión del gobierno. Aunque
se trata del mayor déficit desde 2015, no representa un gran riesgo para la
economía.
El norte, gran exportador del
país
Hay una lucha entre el noreste (cinco entidades) y el
noroeste (cuatro entidades) del país como los exportadores predominantes del
país. La región noreste, que hoy representa 27% de las exportaciones
nacionales, reportó un crecimiento exportador de 17.0% anual en el primer
semestre del año, que se suma al 19.1% de 2021. Es una región que ha ganado
cinco puntos de peso desde 2007.
La región noroeste representa ahora casi 26% de las
exportaciones totales. A nivel individual, Chihuahua es la entidad más
exportadora del país, con casi 59 mil millones de dólares en 2021, equivalente
a 11.8% del total, seguido de Coahuila, con cerca de 54 mil millones (10.8% del
total).
La región que más ha avanzado en el tiempo es el Bajío
(Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí y Zacatecas), que ahora
pesa 14% del total exportado del país, cuando en 2007 era de solo 7.8%. Su
ritmo de crecimiento ha sido elevado, aunque en el primer semestre de este año
se ha moderado hasta menos de 10% anual, el más bajo entre las seis regiones
del país. En el otro extremo, las exportaciones del sureste han descendido y
están muy lejos de su máximo histórico.
Banco de México sube tasa de
referencia hasta 9.25%
Algunos subgobernadores del Banco de México han señalado que
optarán por subir la tasa de referencia local en la misma medida que lo haga la
Fed de Estados Unidos. Lo anterior, con el fin de no perder competitividad en
tasas y ayudar a mantener la estabilidad cambiaria que predomina en México por
varios años consecutivos. En este momento, y a pesar del ambiente externo
complejo, el tipo de cambio se cotiza en 20.14 pesos por dólar.
A nivel internacional, se percibe un ambiente de pesimismo
en torno al riesgo de una recesión en Estados Unidos, misma que podría
materializarse en el primer semestre del año entrante. En este momento ya se
registra cierta desaceleración en aquel país. Muchos bancos centrales están
subiendo sus tasas de interés de manera más intensa que en el primer semestre,
todos siguiendo la tendencia de la Fed, pero además presionados por los altos
niveles de inflación en sus países.
La Junta de Gobierno de Banxico decidió, nuevamente, elevar
su tasa de referencia en 75 puntos base (29 de septiembre), esta vez hasta
9.25%, ahora también por unanimidad de sus cinco miembros. De los 33 analistas
encuestados por Citibanamex, 32 esperaban un movimiento de esta magnitud, con
expectativas de que Banxico eleve su tasa hasta 10.0% al cierre de este año.
Varios especialistas piensan que esta tasa finalizará en 9.50%, mientras que
otros apuestan por un 10.50%. Si esto último se cumple, significaría que, en
las Juntas de noviembre y diciembre, la tasa se elevaría 75 y 50 puntos base,
respectivamente.
La inflación en Estados Unidos y otros países ha empezado a
bajar, en algunos casos de manera significativa. En el caso del vecino del
norte, la reducción es aún moderada (a 8.1% anual en agosto), por lo que la Fed
seguirá subiendo su tasa hasta niveles de 5.50% hacia mediados del año
entrante. Esto último, siempre y cuando la inflación de ese país defina una
trayectoria descendente en los próximos meses, de manera que la Fed esté convencida
de que se detienen las alzas y van camino a una inflación de 2% hacia 2025, que
es su meta.
El Banco de México tendrá que recorrer un camino similar, de
seguir subiendo su tasa de interés, posiblemente hasta 10.75% a mediados de
2023. Nuestra inflación aún no cede y no ha empezado a cambiar de dirección,
pese a que en la primera quincena de septiembre se ubicó en 8.76% anual versus
8.77% de la quincena previa. El sesgo inflacionario local sigue siendo al alza,
así como uno a la baja para el crecimiento económico.
El mercado espera que la tasa Banxico descienda a 9.25% para
el cierre del próximo año, en condiciones en que la inflación bajaría hasta
4.74% en ese año, desde 8.36% al cierre de 2022. Banxico revisó su inflación
estimada para el cuarto trimestre de 2023 a 4.0%, desde el 3.2% previsto en su
Junta del 11 de agosto.
LA ECONOMÍA CRECE UN POCO MÁS DE
LO ESPERADO
En su reporte oportuno del 18 de agosto, el Instituto
Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) estimaba, a través de su modelo
Nowcast, que el IGAE (proxy mensual del PIB) habría crecido 1.5% anual en
julio. Era una cifra baja y poco alentadora. Sin embargo, la final de julio
indica que la economía creció 2.2% anual. En esa ocasión, el INEGI estimaba que
los servicios crecerían 0.8%, mientras que el resultado final ha sido de 1.7%,
más del doble que lo esperado. Complementariamente, el sector secundario creció
3.5% anual, mientras que el primario retrocedió 2.7%. Lo anterior significa
que, la economía ha crecido un poco más de lo esperado, razón por la cual los
analistas del mercado han revisado al alza sus estimaciones para este año, a
2.0% según la encuesta de Citibanamex, cuando en junio esperaban 1.7%.
Dentro del sector secundario, contrasta el buen desempeño de
las manufacturas, que crecieron 6.7% anual en julio, frente a la leve caída de
la construcción (-0.8%). Las manufacturas se benefician del repunte
extraordinario de sus industrias exportadoras, toda vez que cerca de 40% de las
ventas manufactureras se destinan al exterior. En este momento, el nivel de
producción de las manufacturas ya está 5.7% por encima de febrero de 2020,
antes de la pandemia. En cambio, la construcción está 7.7% por debajo de esa
fecha.
En este momento se vive un ambiente de una posible recesión
para Estados Unidos hacia el primer semestre de 2023. Ya se ven señales de desaceleración
en esa economía y es posible que en el cuarto trimestre de este año veamos
cierto contagio hacia nuestra economía. CIAL Insights mantiene su estimación de
que la economía mexicana crecería 1.8% en este año, esperándose una tasa de
solo 1.3% para 2023, con sesgo a la baja si la economía mundial baja
significativamente su ritmo. Las alzas en las tasas de interés mundiales están
siendo más agresivas que lo que esperaba a principios de este año, condición
que ayudará a desinflar los precios, pero será a costa de sacrificar el
crecimiento.