Ante esto, el precio del aguacate en suelo estadounidense está alcanzando un máximo histórico, teniendo una demanda sin precedente el fin de semana pasado, de casi 40% a comparación con otros meses, todo con el fin de acompañar los nachos y las cervezas que nunca pueden faltar en la mesa del futbol.
El 97% del aguacate que consume Estados Unidos proviene de Michoacán donde los municipios trabajan en una franja aguacatera para proveer del alimento. Esto demuestra el impacto que tiene México en territorio norteamericano, y es que por los problemas logísticos que hay a nivel mundial, una caja de 10 kilos suele costar 6,29 dólares más que hace un año. La caja más grande con aguacate sale en 60 dólares y la más pequeña en 40.