El sistema de las bolsas de aire contribuye de manera fundamental a la movilidad segura en los vehículos modernos. Continental comenzó a desarrollar unidades de control de airbag (ACU), el corazón del sistema vital, en Regensburg, Alemania, ya en 1981. La producción comenzó en 1986, hace 35 años. Desde entonces, se han fabricado más de 350 millones de UCA en los sitios de la compañía tecnológica en todo el mundo.
Las unidades de control cumplen los más altos estándares de seguridad contra accidentes y despliegue fiable de
airbag. Además de otros sensores, una UCA recibe señales de los llamados satélites de presión, que detectan y notifican la onda de presión de una colisión. Continental fue pionera en la producción de estos satélites a presión hace 25 años. Desde entonces, el número de airbags en el vehículo ha seguido aumentando porque reducen considerablemente el riesgo de lesiones en caso de accidentes. Basándose en 40 años de experiencia, Continental está desarrollando nuevas funciones para optimizar aún más el efecto protector de las bolsas de aire en los automóviles.
Bajo el lema 'Allround Protection', las dos perspectivas alrededor del vehículo ('Seguridad previa al accidente') y en el vehículo ('Vigilancia de la seguridad del ocupante') se conectarán más estrechamente en el futuro para adaptar la estrategia de despliegue de una bolsa de aire, a las personas y a su posición. En particular, el objetivo es utilizar las señales de las unidades de control conectadas para implementar nuevas funciones que permitan desplegar airbags antes y más controlados, así como prolongar su vida útil.
Control específico del nivel de llenado de la bolsa de aire para una óptima protección del pasajero
La 'carrera' de una bolsa de aire en el vehículo puede verse en el hecho de que los primeros sistemas controlaban una sola bolsa de aire, mientras que un ACU moderno controla hasta 48 circuitos de encendido. En el futuro, es probable que esta cifra aumente aún más. El rendimiento de una UCA varía según el segmento, el vehículo y el equipo, lo que significa que estas unidades de ECU son escalables. Continental está implementando esto con tres variantes modulares de su unidad de control. Dependiendo de la versión, las unidades de control ofrecen funciones básicas para la protección de impactos frontales y traseros a través de airbags frontales y tensores de cinturones hasta funciones adicionales para actualizaciones sobre el aire, seguridad cibernética y detección de choques incluso durante el proceso de carga de los vehículos eléctricos. Mientras que otras ECUs se están transformando en productos basados en software en la reorganización de la arquitectura E/E con centralización y unos pocos ordenadores de alto rendimiento, esto no se aplica a la ACU.
Las nuevas funciones de la 'Allround Protection', de Continental incluyen el encendido previo de las bolsas de aire para poder interceptar de manera óptima a las personas que están dentro. Un factor clave para ello es la integración de los datos previos a la colisión, proporcionados no sólo por los sensores de los alrededores del vehículo sino también por el Monitor de Seguridad que actualmente está en desarrollo de la base y proporciona información sobre las personas y sus posiciones dentro del vehículo.
Para poder controlar el nivel de llenado de la bolsa de aire de forma más selectiva en función de la posición del ocupante, se está desarrollando una válvula de control. Esta nueva válvula tiene la dinámica de controlar el flujo de gas en el airbag en pocos milisegundos. Esto permite que las aberturas de escape de la bolsa de aire ean más pequeñas y el airbag se mantenga más largo gracias al control de presión con la válvula de control del airbag - con la dureza adecuada para la situación y los ocupantes. En el futuro, es incluso concebible que la bolsa se suavice exactamente en el momento del impacto del pasajero, de modo que se reduzca el efecto de rebote Técnicamente, la válvula controla dinámicamente la presión de 600 bar en el rango de milisegundos y lo hace con su propio peso actualmente por debajo de 300 g.
Las nuevas funciones y sistemas también detectan daños en la batería e impactos leves
El sistema de detección de contacto CoSSy (sistema de sensores de contacto) está en desarrollo para daños y contactos muy ligeros. Ya se presentó en 2019 y completa la protección integral. El sistema detecta y clasifica las señales de sonido, como un impacto a baja velocidad, para que el vehículo pueda detenerse inmediatamente. Una vez instalado, el sistema también soporta características como la detección del vandalismo (arañazos), las condiciones de la carretera, el conductor por voz y los vehículos de emergencia que se acercan.