Ante tal participación, Manuel Montoya, director general de CLAUT, ofreció una conferencia en el marco de la clausura del evento. En su charla abordó la participación de la industria automotriz, los requerimientos regionales que pide el Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC) y, tal vez, la idea más importante, la participación de empresas Tier 2 para abastecer de proveeduría en esta nueva etapa. Al inicio de su ponencia, Manuel Montoya mostró gráficos que aseguraron que la recuperación de la producción automotriz llegaría para 2022 o 2023, considerando que la industria ahora lidia con la escasez de semiconductores. Aun así, en el país, las marcas americanas siguen liderando la venta en México y, a la vez, la industria de autopartes sigue siendo una de las más importantes de México. Entonces con el fin de mantener una buena importación y exportación, las OEM, Tier 1 y Tier 2 deben colaborar para adaptarse a los beneficios del T-MEC.
Ante el T-MEC, las Tier 1 también deben de cumplir con una la regla de origen, esto permite que se integren a sus procesos las empresas Tier 2, pues el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no facilitaba que dichas empresas se incorporarán, al contrario, permitía que empresas Tier 2 de Asia o Europa ofrecieran proveeduría en México. Pero ahora con el nuevo tratado, las reglas cambian y las Tier 1 deben de buscar a proveedores regionales y más cercanos a ellos. Según, Manuel Montoya, las empresas Tier 1 han buscado los mismo commodities durante 8 años, siendo los más requeridos: piezas de plástico, piezas maquinadas, estampadas, fundidas, componentes electrónicos, forjas, ensambles, entre otros. ¿Qué nos dice esto? Que empresas Tier 2 capaces de abastecer estos requerimientos podrán integrarse a la industria automotriz y ser jugadores claves en los próximos años.
La misión que tendrán los clusters automotrices será captar la proveeduría de las Tier 2 y ayudar que se comuniquen con las Tier 1 o con OEM para fortalecer la cadena de proveeduría, pues esto significaría mejor economía en México y mayor empleo para los mexicanos. Pero, como Manuel Montoya explicó, en el país aun no existen suficientes empresas Tier 2 para abastecer a la industria: 'El problema es que tenemos pocas Tier 2, 300 o 400 quizás, habría que tener 2 mil o 3 mil empresas Tier 2 para cubrir el 12.5% de contenido regional que se agregó con el T-MEC'.
Manuel Montoya explicó que hay dos formas de obtener empresas Tier 2. Una es traer inversión extranjera directa, es decir invitar a proveedores extranjeros a radicar en México para que aprovechen las ventajas competitivas de la región y el T-MEC. La otra es desarrollar a los proveedores. Para este segundo caso, Manuel Montoya contó que ya los clusters automotrices de México están generando encuentros y eventos para que las empresas se conozcan, puso de ejemplo el que desarrolló el Cluster Automotriz de Nuevo León (CLAUT) en torno al plástico, en donde 40 empresas compradoras tuvieron más de 300 citas de negocio con 127 empresas Tier 2 relacionadas a procesos plásticos. En este sentido, dijo que podrían hacerse eventos sobre el aluminio, el acero, el maquinado, entre otros, porque estos son los mismos commodities durante 8 años.
Al finalizar su ponencia, durante la ronda de preguntas y respuestas, Manuel Montoya comentó que era posible que empresas Tier 2 mexicanas y extranjeras trabajen en conjunto, ya fuera que una ofreciera la tecnología y la otra el expertis sobre la región o que mutuamente iniciarán un proyecto. También mencionó que las certificaciones no son difíciles de conseguir y que varios clusters, así como asociaciones de gobierno apoyan con programas para conseguir las certificaciones. Lo que sí quiso recalcar es que la banca en México debe de ser valiente para entrar en la industria automotriz y ser más accesible para que las empresas puedan tener apoyos para iniciar en la cadena de proveeduría.
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