'Diseñar una turbina flotante es como colocar un autobús en un poste alto, hacerlo flotar y luego estabilizarlo mientras interactúa con el viento y las olas', dijo Rogier Blom , ingeniero e investigador principal del proyecto. quien destacó el gran tamaño del problema que requiere que una plataforma flotante pueda soportar una estructura de hasta 260 metros de altura.
La instalación de sistemas flotantes permiten eliminar la necesidad de construir cimientos de hormigón en el fondo marino y los reemplaza con turbinas flotantes ancladas al fondo marino con cables largos. Lo que permite reducir de forma significativa los costes de construcción, al mismo tiempo que aumenta la eficiencia operativa pudiendo acceder a vientos más fuertes y constantes.
Los investigadores de GE presentaron los detalles del proyecto ATLANTIS (Turbinas aerodinámicas más ligeras y a flote con tecnologías náuticas y servocontrol integrado) de ARPA-E, que permitirá diseñar y desarrollar controles avanzados para soportar una turbina eólica marina flotante de 12 MW.
El resultado podría revolucionar la implantación de energía eólica en le mundo, dando paso a enormes parques marinos que logren aprovechar al máximo una de las fuentes renovables con mayor potencial de ofrecernos un futuro libre de emisiones y que como vemos cuenta con un potencial todavía por descubrir y desarrollar.