Desafíos del sector salud en la nueva realidad
Escrito por Cluster Industrial
Artículos especiales
04/05/2021 11:27
Ante la nueva normalidad derivada de la COVID-19, los sistemas de salud se han adaptado buscando una infraestructura más sólida y un trato más humano a través de las nuevas tecnologías. Conoce más en el siguiente artículo de opinión.
Por Fausto Ávila
La pandemia de COVID-19 y sus efectos han tenido impactos económicos devastadores en muchos países; han generado cambios radicales en nuestras vidas, pero sobre todo un efecto sustancial en los sistemas de salud, que han enfocado sus esfuerzos en responder a la crisis sanitaria y han tenido que empezar a mirar hacia la nueva realidad.
Como Firma, pensamos que la pandemia nos ha dejado tres lecciones: 1) la gran capacidad que tiene la humanidad de adaptarse; 2) la urgente necesidad de un sistema de salud más fuerte, un mejor sistema educativo y una mejor infraestructura, y 3) el poder de la tecnología para compensar nuestra vulnerabilidad humana.
El sector salud antes de la pandemia
La situación actual ha puesto en entredicho las bases con las que trabajaba el sector salud antes de la pandemia, buscando viabilidad financiera, seguridad y equidad al proporcionar los servicios de salud a la población, así como un mayor acceso a dichos servicios.
Antes de la pandemia, las mayores innovaciones provenían de las empresas farmacéuticas y de dispositivos médicos, que desarrollaban nuevos fármacos y tratamientos para enfermedades crónico-degenerativas principalmente (enfermedades mentales degenerativas, diabetes, enfermedades cardiovasculares, entre otras).
En contraste, el sector salud se mantenía con los mismos esquemas de atención que se establecieron en décadas pasadas, y que han venido sufriendo mayores presiones en la medida en que la población mundial aumenta y se eleva la expectativa de vida.
Enfrentando la nueva realidad
La nueva realidad de la atención médica implica el rediseño de los sistemas de atención para abordar la atención primaria, secundaria, comunitaria y aguda en un mundo posterior a COVID-19. Es necesaria una fuerza laboral interprofesional más ágil, que brinde atención en equipo; con personal capacitado de primera línea que aproveche la tecnología (incluida la atención virtual) para que esta le permita concentrarse en trabajos de mayor valor.
Por otra parte, el sector salud debe mantener la atención virtual y los avances digitales que las personas que han requerido atención médica esperan, con la finalidad de garantizar el acceso continuo a los servicios sanitarios de manera segura y oportuna.
En este sentido, es necesario atender y tratar de utilizar a favor del sector las siguientes áreas de oportunidad:
1. Los servicios digitales llegaron para quedarse:
a. Consultas remotas
b. Monitoreo a distancia
c. Registros personales de salud
2. Se requiere un rediseño del sistema de salud para proveer un servicio centrado en el paciente y superar retos como los siguientes:
a. Seguridad de datos y privacidad
b. Dificultad para compartir datos y análisis de los pacientes
c. Datos del paciente ubicados en múltiples repositorios
d. Presupuesto insuficiente
3. La innovación es imperativa para cubrir la demanda de los sistemas de salud mediante herramientas como:
a. Internet de las cosas (IoT)
b. Inteligencia artificial / machine learning
c. Realidad virtual / realidad aumentada
d. Impresión 3D / Imágenes 3D
4. Cambios en las habilidades de la fuerza laboral en el sector salud
Atender estos temas, permite a las organizaciones transitar de la innovación básica a una innovación disruptiva, tan disruptiva como la pandemia en todos los sectores y ámbitos de vida.
En los meses siguientes veremos la transformación digital de todos los aspectos de la atención médica, desde la experiencia del paciente hasta los sistemas clínicos y operativos o las habilidades y cultura del personal.
Las instituciones que brindan servicios más innovadores y ambiciosos en sus sistemas de atención ya planifican y cumplen esta nueva realidad, invirtiendo en las capacidades adecuadas para lograr la transformación. En ese sentido, COVID-19 ha probado que es posible llevar a cabo esta transformación a mayor velocidad. Tal como se desprende de Perspectivas de la Alta Dirección en México 2021, 86% de las organizaciones del sector salud encuestadas consideran que la adopción de tecnologías se aceleró ante la pandemia.
Los líderes en salud pueden brindar atención de mayor calidad asegurándose de tener el negocio y la tecnología adecuados, arquitecturas respaldadas por operaciones habilitadas digitalmente, modelos para absorber y explotar cada nueva ola de innovación en la atención clínica y la práctica empresarial. Esto acarrea resiliencia y adaptabilidad a largo plazo en lugar de ofrecer mejoras aisladas o vigentes por un lapso determinado.