Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, presentó modificaciones de la Ley de Aviación Civil ante la Cámara de Diputados. Este busca la uniformidad entre la Ley de Aviación Civil y su Reglamento, el Reglamento para la Expedición de permisos, las Licencias y Certificados de Capacidad del personal técnico aeronáutico, y el Reglamento del Registro Aeronáutico Mexicano.
El presidente propone que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), a través de la Agencia Federal de Aviación Civil, ejerza la autoridad aeronáutica en aeropuertos, helipuertos y aeródromos de manera general, ayudándose de los comandantes regionales y comandantes de cada aeropuerto.
Los objetivos de la Ley de Aviación Civil son regular la prestación y desarrollo de los servicios de transporte aéreo que ofrecen las aerolíneas mexicanas, así como la explotación, uso o aprovechamiento del espacio aéreo situado sobre el territorio nacional.
El documento establece que, en caso de accidentes, las operaciones de búsqueda y salvamento estarán a cargo de la SCT, pero los costos directos que se originen deberán ser pagados por el concesionario o permisionario. Respecto a la prohibición a permisionarios y propietarios extranjeros de aeronaves no mexicanas destinadas para uso particular en prácticas de cabotaje en territorio nacional, la autoridad busca que únicamente los permisionarios mexicanos que prestan servicio de transporte aéreo internacional puedan transportar en el territorio nacional a los pasajeros, carga o correo que haya sido embarcado en un punto en el extranjero.
Además, se busca que cada pasajero pueda llevar en cabina, sin pago adicional, hasta dos piezas de equipaje de mano, y se plantea la revocación de la licencia a todo piloto en estado de ebriedad que pilote o que permita que un miembro de la tripulación su trabajo bajo los efectos de alguna droga.
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