'Hacer lo mismo dos veces no está en mi naturaleza', dice Agnes mientras reflexiona sobre su carrera. Le encanta la tecnología y, tras un doctorado en física nuclear, empezó en CNRS, la Agencia Nacional de Investigación Científica de Francia. Luego se unió a Safran, donde progresó rápidamente, primero en Safran Aircraft Engines, trabajando en diseño y luego en RAMS.
'La función era bastante nueva y todo estaba aún por desarrollar', recuerda con entusiasmo. Basándose en su experiencia, se trasladó a Safran Engineering Services para desarrollar la función RAMS en una de sus unidades de negocio, donde permaneció durante 10 años. Después de este puesto de gestión, regresó a Safran Aircraft Engines en 2016 como auditora técnica, todavía trabajando en su campo de especialidad.
En 1999, Agnes se convirtió en experta sénior en un momento en que la corriente de expertos de Safran aún estaba en su infancia. Hoy es Fellow Expert y tiene una visión clara de su función. Su tarea principal es ayudar a alcanzar los más altos estándares, en particular mediante la identificación de nuevos métodos para ayudar a los diseñadores (modelos, estadísticas, métodos probabilísticos, etc.) y, a su vez, garantizar la validez de sus proyectos. Ser un 'Fellow Expert' también significa fomentar la innovación, la formación y el coaching de personas como una forma de capitalizar y transmitir sus conocimientos y experiencia. Ella está involucrada en la capacitación de nuevos empleados coordinando e impartiendo varios módulos, así como dando conferencias en RAMS en la Universidad de Safran.
Agnes todavía se plantea una pregunta: ¿Por qué no hay más mujeres expertas en Safran? 'No somos muchos, pero las mujeres representan casi el 30% de la plantilla de Safran', señala.
No ha encontrado ninguna barrera en particular en su propia carrera, por lo que tiene otra explicación: cómo se ven las mujeres a sí mismas. '¿Se dan cuenta de las habilidades que pueden aportar al Grupo?' ella pregunta. '¿Se atreven a poner en práctica esas habilidades? ¿Hay suficientes modelos femeninos con los que puedan identificarse? ¿No deberíamos animarlos de manera proactiva a reconocer sus habilidades y darlas a conocer?'. Según Agnes, la cultura es mucho más propicia hoy que cuando empezó.
'Cada vez más mujeres se están moviendo a puestos de alto nivel, y el Premio Nobel de Química 2020 fue para dos mujeres; estos son ejemplos alentadores', dice. 'Así que, adelante. Las mujeres tienen un papel importante que desempeñar en la comunidad de expertos de Safran, ¡y el Grupo necesita sus habilidades!'.
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