La demanda de autos eléctricos, híbridos e híbridos enchufables
sigue en aumento en todo el mundo, pero los vehículos de celdas de combustible
de hidrógeno o FCV por sus celdas en inglés, aún no captan la popularidad de los
mercados. Toyota busca cambiar eso con la nueva generación de su auto de
hidrógeno Mirai (que significa literalmente futuro en japonés), puesto a la
venta este mes de diciembre en el mercado asiático.
Lanzado en 2014, el Toyota Mirai fue el primer vehículo
comercial de este este tipo en el mundo, y aunque ha conseguido el apoyo del
gobierno japonés, enfrenta dificultades en los mercados internacionales por la
falta de estaciones de carga para celdas de combustible, una pobre valuación de
venta de segunda mano, entre otros factores.
Sin embargo, la intención de Japón de liberarse totalmente de
las emisiones de carbono para 2050, y de Europa y China de hacer lo mismo para
2060 ha revivido al Mirai de entre las cenizas de la gama de modelos de Toyota.
El nuevo Mirai incluye un rango 30% superior por carga que
su antecesor, obteniendo una conducción de hasta 800 kilómetros y es aún más
cuidadoso con el medio ambiente al solo emitir calor y agua como residuos, y obtener
su combustible de una variedad de recursos incluida agua, metano y basura, por
ejemplo. Este aspecto le interesa a Japón, al ser un país con pocos recursos
naturales.
Hasta septiembre pasado, la generación anterior del Toyota
Mirai solo había vendido 11,100 unidades a nivel mundial, con seis años en el
mercado, aunque lidera las ventas de FCV por encima de vehículos de este tipo
de Honda y Hyundai.
Con un subsidio de casi 10 mil dólares del gobierno japonés,
el nuevo Mirai aún tiene la barrera del costo como principal limitante para su éxito,
costando alrededor de 48,000 dólares, aunque incluye nuevas capacidades como la
de estacionarse de manera autónoma, y un nuevo diseño más deportivo.
El mercado para vehículos FCV se calcula en más de 1 millón
para China en 2030, y 800 mil para Japón en la misma fecha. Para comenzar a
atacar esta demanda futura, Toyota pasará de producir 3,000 vehículos FCV anuales
hasta 30,000 en el próximo par de años.
Con información de Reuters.