De acuerdo con Óscar Albín, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), México tiene una oportunidad de negocio con las nuevas normas, pues la atracción de inversiones en la región USMCA estará marcada, principalmente, por las empresas que tengan que alcanzar los objetivos fijados.
“El principal reto se dará en que las compañías incorporen y busquen fabricantes de materias primas y componentes que estén en la región de América del Norte”, afirmó.
El resultado será que llegarán y crecerán las inversiones de las empresas en la zona de los tres países que conforman el tratado para producir los componentes que se exportaban desde otras naciones.
“Eso es precisamente lo práctico del nuevo tratado; busca fortalecer la región contra las importaciones que se hacen, principalmente desde Asia y Europa”, comentó.
Según Albín, se pronostica que las nuevas inversiones lleguen principalmente de empresas asiáticas y europeas, y que se incorporarán donde por logística y rentabilidad les sea más conveniente. “Pueden llegar a Estados Unidos, México o Canadá. Nuestro país va a tener oportunidad de atracción de inversión indudablemente, pero puedo decir que el sur de Estados Unidos también es una buena alternativa, de hecho es nuestro principal competidor en ese sentido”, aseguró.
Por el momento, el territorio fronterizo estadounidense luce como el mejor prospecto para atraer capital que nuestro país, principalmente, por la Reforma Fiscal actual, que inició hace poco más de un año en esa zona.
“Representa una gran ventaja contra nuestras leyes fiscales para inversiones nuevas. Seguramente, en los próximos años, México se replanteará la actual condición fiscal para poder hacer frente a la competencia que tenemos del otro lado de la frontera”, señaló el dirigente de la INA.