Lo hemos visto en
los últimos días, el T-MEC, esa gran luz para el bienestar y crecimiento de
México, que nuestro mismo gobierno celebró, quedó opacado por la crisis de la
pandemia, para resurgir entre el reclamo de los Estados Unidos sobre los
compromisos energéticos de nuestro país. Pero no son solo los gobiernos los que hacen
que un tratado comercial como el T-MEC (USMCA o CUSMA) funcione para la región,
son los industriales también quienes posibilitan su ejecución. Para ello, la Reunión
Anual de Industriales, que se realiza en el marco virtual de Industrial
Transformation México 2020, la feria de industria 4.0 más importante de
Latinoamérica, reunió a un panel de equivalentes de la CONCAMIN en Estados
Unidos y Canadá para discutir todo lo relacionado con el T-MEC, sus
oportunidades y desafíos.
Francisco Cervantes, Presidente de la CONCAMIN se
unió a Jay Timmons, Chairman de la National Association of Manufacturers (NAM,
USA), Dennis Darby, Presidente de la Canadian Manufacturers & Exporters
y Larry Rubin, Embajador de la CONCAMIN en Estados Unidos en este panel.
-Los tres representantes industriales de los tres países de Norteamérica
coincidieron en que las oportunidades son equitativas para los tres países.
-Coincidieron en que los desafíos del T-MEC, solo pueden
resolverse bajo la colaboración y unión, tanto de las partes industriales
de cada país, como de los gobiernos y la comunicación entre estos.
-Sin el T-MEC
aprobado, la recuperación de la pandemia a nivel regional sería mucho más
difícil.
-Los tres países son muy sensibles en cuanto a las
operaciones de China, y cómo se manejan esas amenazas comerciales son cosas
que deben hablarse en el capítulo 26 del T-MEC para trabajar en conjunto y
enfrentarlas, como una herramienta de armonización.
Dennis Darby, de la CAME, dijo que han buscado que haya un
reconocimiento fuerte de la importancia del sector manufacturero a pesar de las
restricciones de movilidad que causa la pandemia. Además, afirmó que más del
90% de las exportaciones canadienses se quedan en el mercado norteamericano, y
que aunque solo un 2% de estas van a México, este número crecerá en la
medida que el T-MEC permita actuar como un solo bloque y esta idea llegue a
las empresas y los trabajadores de los tres países.
Francisco Cervantes, de la CONCAMIN recordó brevemente la historia de desarrollo que significó el TLCAN para México y sus exportaciones pues hoy el comercio es 40 veces mayor que antes que el primer tratado y el 55% de las inversiones extranjeras son norteamericanas. Luego puso como ejemplo a la industria automotriz, para hablar de los retos que conlleva el T-MEC, pues el 75 por ciento del contenido de los automóviles debe ser regional, el 70% del acero utilizado que debe serlo también y el 40 y 45% de los automóviles y camiones, respectivamente, deben ser fabricados por trabajadores que ganen 16 USD la hora.
Jay Timmons, de la NAM habló sobre las barreras por superar, que son comúnmente
las leyes y regulaciones que pueden restringir exportaciones y muchas veces
no son necesarias. Como ejemplo puso la situación en México con los
etiquetados, la NOM, que ha supuesto problemas para productores, ya que
estos nuevos requerimientos pueden limitar a los fabricantes para explotar sus
productos.
Los panelistas de nuestros países vecinos también mostraron preocupación
por la restricción de permisos de energía renovable en favor de las empresas
paraestatales energéticas como CFE y PEMEX. Aceptaron que si bien, son
bien intencionados, terminan afectando a los trabajadores mexicanos y de
toda la región. Dennis Darby, en particular, explicó que el capítulo 26 del
T-MEC promete mucho pues permite tener comités que protejan el comercio de
la región.
CONCAMIN tiene como lema en esta RAI, Construyendo una
Industria del Futuro (I4.0MX): los retos del futuro. Y Francisco Cervantes
lo dejó ver al mostrar los grandes esfuerzos que CONCAMIN realiza para lograr
la cooperación de los gobiernos de la región hacia una nueva industria que
avance con confianza. "Estamos trabajando muy cerca con la gente del Presidente
López Obrador, para explicar que el sector industrial quiere políticas que
les den confianza, por ejemplo, para hacer que se incremente la
competitividad en el sector energético pues necesitamos cumplir con la agenda
2030 de la ONU".
Para lograrlo, no puede depender de los combustibles
fósiles, "deberíamos colaborar entre los tres países para crear trabajadores en
energías limpias, además de toda la innovación que la pandemia ha generado; avanzar
políticas para todos, avanzar en el desarrollo del sureste, invertir en
educación 4.0 en esta región para nivelar el juego en el país porque el
norte es más competitivo que el sur, debemos movernos hacia un mejor país",
dijo Francisco Cervantes.
Finalmente, Jay recalcó que toda la comunidad empresarial en
la región tiene el objetivo de llevarnos a la recuperación económica, con
las estrategias correctas en el momento, como llevando cubrebocas, tomando
sana distancia y evitando reuniones innecesarias. Dennis, por su parte, dijo
que cuando hay fuertes políticas públicas que protegen a los trabajadores eso
hace una gran diferencia, pues todos estamos en el mismo bote y juntos
debemos ser el catalizador para resolver los retos presentes.
Larry Rubin, Embajador de CONCAMIN en USA.
RUEDA DE PRENSA
Manuel Pérez Cárdenas, Jefe de la Oficina de la Presidencia
de CONCAMIN dijo a los medios que "No pueden tomarse decisiones contrarias en
la región; Canadá y Estados Unidos piensan que la región sería más fuerte si
México pusiera más de su parte; le falta claridad, consistencia y
predictibilidad". El vocero mencionó la frase que Alfonso Romo, en representación
del Presidente de México, hizo en la inauguración de la RAI: "No promover
las inversiones es igual a traicionar la lucha contra la pobreza", y dijo
que en ese sentido la RAI es una plataforma potente para dar estos mensajes de
tranquilidad a los mercados.
Larry Rubin, Embajador de CONCAMIN en USA, quien moderó la sesión, reiteró que
el mensaje fue claro en que nuestros vecinos de región necesitan la certidumbre,
y tener una cancha pareja en las reglamentaciones y regulaciones, pues si Europa
lo puede hacer con más de 20 países, nosotros deberíamos hacerlo de forma más sencilla.
Además, habló de la importancia de la colaboración entre las tres
organizaciones en la pandemia, que le ayudó a México a abrir más industrias que
no fueron consideradas esenciales.
Respondiendo a Cluster Industrial, sobre los posibles
efectos que la próxima elección presidencial en lo Estados Unidos tenga en el
desenvolvimiento del T_MEC, Larry Rubin dijo que "No importa quién gane la
presidencia, la realidad es que la sinergia entre los países y las instituciones
como CONCAMIN, NAM y CAME aglutina a miles de empresarios y aunque cambien
las prioridades políticas, los gobiernos deberán seguir escuchando a los
industriales pues de ellos depende si las energías renovables o los autos
eléctricos se venden o no, si harán las innovaciones e inversiones
necesarias para posicionar estos productos y servicios más favorables a nuestro
planeta y cumplir los objetivos de la ONU al 2030".