¿T-MEC y COVID-19 son una tragedia?
'La
regla de origen es dura y la caída de la economía por el COVID-19 es muy
fuerte, pero también es una oportunidad', así inició su seminario Eduardo
Solis, expresidente de AMIA. Él explicó que el COVID-19 recordó que la cadena
de suministro debe de estar más cerca, por que entramos a un momento de desglobalización,
es decir las empresas querrán volver a
América del Norte, porque la pandemia inmovilizó no solo la producción sino la
cadena de suministro.
Además,
Eduardo Solis indicó que en el mercado manufacturero podría haber una inversión
de 60 mil millones de dólares, en especial en las Tier 2 donde hay una
oportunidad fundamental, ya que el
proveedor de primer nivel es el más desarticulado del mercado, es decir más del
80% de sus materiales son importados. Explicó que hace 14 años en Juárez, se
hizo un estudio donde se encontraron a 200 proveedores de maquinados, pero de
esos 200 solo 20 tenían procesos para la industria automotriz. Así que el
trabajo de las empresas no es solo identificar nuevos proveedores sino
robustecer sus procesos.
México es un campeón en el sector
automotriz
Eduardo
Solis dijo que la industria automotriz es el principal generador de reservas
internacionales. Casi 90 mil millones de dólares de superavit. "Somos el cuarto
exportador a nivel mundial de autos y el quinto de autopartes", dijo seguro
ante la pantalla. Ante estos datos, explicó que una pieza automotriz viaja
entre 3 y 5 veces por Norteamérica antes de ser incorporada a un vehículo. Explicó
que un pistón no se fabrica en México, se fabrica de aluminio que llegó de
Michigan a Canadá, se manda a México, se hace la maquinaria y termina la pieza en
Wisconsin. "El nivel de integración que tenemos en América del Norte es
enorme". Ante esta información la cadena de suministro y de producción se
resignifica con el T-MEC y Chihuahua se posiciona como un actor clave al ser un
estado fronterizo.
T-MEC y la industria automotriz
Eduardo
Solis explicó que la regla de origen empuja a buscar proveedores regionales
para cubrir el 75% dentro de 3 años, que las autopartes esenciales crecen al
65% cuando son incorporadas a los vehículos y que el valor de contenido laboral, no es otra cosa que el 40% del vehículo
debe de ser de Estados Unidos o Canadá, es decir en regiones donde paguen 16
dólares la hora. México no subirá el sueldo. Ante estos retos, el propio
T-MEC propone una dispensa de 5 años para acordar un plan para cumplir con las
nuevas reglas. A lo que Eduardo Solis explicó que por lo tanto habrá más proveedores regionales para desglobalizar
el mercado.
¿Dónde están las nuevas
oportunidades de negocios?
Alejandro
Rojas comentó que: "Anteriormente las reglas de origen era una cuestión
sencilla, las empresas solo veían a quién le compraban y a quién le vendían".
Ahora no es solo ver a quien le compro, sino a quien le compra mi proveedor.
Los tratamientos se vuelven diferentes, es decir se debe de hacer un análisis no a nivel de industria sino a nivel de
empresa, dónde estoy en la cadena de suministro.
¿Qué
estrategias puedo hacer para atraer negocios en México? Alejandro Rojas explicó
que se importan 70 millones de dólares y de esos, solo el 14% viene de Estados
Unidos, siendo Japón uno de los principales importadores. El T-MEC propone las empresas norteamericanas deben de revisar cuáles
son sus virtudes para reemplazar a esas empresas japonesa y abarcar su producción
en territorio norteamericano. En caso no lograrlo, ver cuáles son esas empresas
japonesas y buscarlos para que vengan a México para que puedan vender su
producto en México y poder exportar a América del Norte. Para esto se
tienen que mostrar las ventajas competitivas de México y de Chihuahua.
"Si
yo soy una empresa en México que puedo fabricar este componente puedo
clasificar al T-MEC, puedo reemplazar a otros proveedores de Asia". Dijo Alejandro
Rojas como estrategia. Pero de ser así, ¿cuál
será el tratamiento para integrarlo con el tiempo? Desarrollar a los
proveedores para tenerlos cerca y aumentar el mercado mexicano. Para ello
es necesario aprender a vincularse en la cadena de valor: dónde está ubicada la
demanda y quiénes son los potenciales proveedores.
Eduardo
Solis explicó que si las empresas extranjeras
identifican una empresa nacional con las capacidades que pide el T-MEC en
Chihuahua, esta puede identificar nuevos potenciales clientes, por ejemplo,
en Coahuila para facilitarle piezas automotrices. En segunda opción, buscar que una empresa se establezca en
Chihuahua, significaría que Coahuila y Nuevo León son un mercado potencial para
ella.
"Lo
importante es saber si los proveedores cumplen con las demandas del T-MEC para
convertir a México en un punto de inversión interesante", concluyó su seminario
Eduardo Solis.
Preguntas frecuentes
¿Estamos listos para transitar a las
nuevas tendencias?
Sí,
ejemplo de esto son las nuevas camionetas eléctricas de Ford que se fabricarán
en Cuautitlán, Estado de México. Es la muestra de que México puede estar ahí en
las nuevas tecnologías y que el salto lo daremos sí o sí.
¿Llegan nuevas plantas ensambladoras
a México?
Claro
que sí, México es un punto estratégico para esto. México regresará al escenario
mundial como el gran jugador que es.
¿Cómo podemos aprovechar el fortalecimiento
de los proveedores locales?
Al
ser Chihuahua un estado fronterizo, hay que ver a quién podemos sustituir en la
cadena de suministro y hacer un plan de estrategia para ello. Recordemos que la
dispensa se acabará en 5 años y las empresas tendrán que tener una mayor
integración con América del Norte y Chihuahua es un punto estratégico por su
posición con Nuevo León, Coahuila y Estados Unidos.