José Guillermo Zozaya,
nuevo presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz
(AMIA) mencionó que, en los próximos años, la industria automotriz enfrentará
grandes retos, pero que AMIA se renovará para ser un motor económico para México. 'Hemos decidido como asociación reinventarnos y redireccionar nuestra visión
para hacer frente a los nuevos retos y construir una nueva historia de éxito',
dijo durante su primera conferencia de prensa virtual.
El primer reto al que se
enfrenta la industria automotriz es el T-MEC, que conlleva cambios en la regla
de origen para la fabricación de vehículos, una nueva metodología de
exportación y el incremento de los porcentajes de contenido regional. Otro reto
es trabajar con el Gobierno Federal para renovar el parque vehicular con el fin
de que los mexicanos cuenten con automóviles más seguros y eficientes. El
último reto es entablar un diálogo con las autoridades para garantizar un marco
normativo adecuado para la industria automotriz.
'Ahora más que
nunca necesitamos tejer relaciones duraderas que sumen para aportar verdaderas
soluciones a los desafíos que enfrentamos como industria a corto y mediano
plazo', indicó José Guillermo Zozaya. Además, agregó que ya se nota la
recuperación de la producción y exportación de vehículos después de meses de la
contingencia sanitaria de la COVID-19. Destacó que la industria automotriz
genera 3.8 % del Producto Interno Bruto nacional y 20.5 % del PIB
manufacturero; aporta 980 mil empleos de manera directa y 3.6 millones de
manera indirecta.
'Viene una
recuperación y como AMIA estaremos ahí para apoyar a todas las armadoras. Hay
toda una infraestructura para que la recuperación sea rápida, fuerte y
confiamos en que esto se empiece a sentir en los próximos meses', aseguró
José Guillermo Zozaya, recordando que las armadoras han invertido 36 mil
millones de dólares en el país, en los últimos 5 años.