Audi ha sido referencia
con la tracción permanente Quattro, que inició un cambio de paradigma en la
tecnología utilizada tanto en los automóviles de serie como de competición.
Ahora, la marca utiliza la experiencia acumulada en este campo desde 1980 para
dar el siguiente paso: la tracción Quattro eléctrica de los modelos de la gama
e-tron, modelos basados en la electromovilidad con una tecnología que combina
precisión en la conducción, deportividad y eficiencia. La marca ofrece un
sistema de tracción a las cuatro ruedas que es altamente variable, dinámico y
preciso, al tiempo que hace un uso eficiente de la energía.
¿Por qué utiliza Audi la tracción eléctrica a las
cuatro ruedas?
'Para nosotros, la
tracción Quattro eléctrica es la combinación perfecta entre rendimiento y
eficiencia', explica Michael Wein, responsable de Sistemas de Control de
Tracción Integral en Audi. 'Combinamos las ventajas en cuanto a eficiencia de
una propulsión con un único eje motriz, con las características dinámicas que
implica un sistema de tracción a las cuatro ruedas'. En la actual gama de
modelos e-tron, solo las ruedas traseras impulsan el auto en condiciones
normales de conducción, mientras que el motor delantero permanece desactivado.
Al ser de tipo asíncrono no existen pérdidas asociadas por arrastre, por lo que
esta disposición consume muy poca cantidad de energía. El eje delantero entra
en acción en milisegundos y de forma imperceptible para el conductor,
activándose solo cuando es necesario.
¿Qué es lo que hace única a la tracción eléctrica
quattro frente a otros sistemas?
Con el e-tron S, Audi se
convierte en el primer fabricante que permite una distribución de torque
altamente variable, gracias a la configuración con un motor en el eje delantero
y dos motores en el eje trasero. En combinación con un sofisticado sistema de
control, la tracción quattro eléctrica, gracias a su funcionamiento con
tracción al eje trasero y activación adicional e imperceptible del eje
delantero, resuelve objetivos contradictorios como son el dinamismo y la
eficiencia. Audi integra funciones como la vectorización eléctrica del torque
en el eje trasero, el control selectivo de torque a través del diferencial
mecánico y la intervención de los frenos, y una cadena cinemática eléctrica con
un alto rendimiento a la hora de recuperar energía. Adicionalmente, los
conductores pueden ajustar el sistema a sus preferencias personales mediante la
selección distintos programas.
¿Qué oportunidades presenta la tracción quattro
eléctrica en comparación con un sistema de tracción a las cuatro ruedas
convencional?
En los modelos e-tron,
un motor eléctrico impulsa el eje delantero y otro, el trasero; las versiones
e-tron S utilizan un motor delantero y dos en el eje trasero. Con la
vectorización eléctrica del torque, es decir, el control del torque de forma
específica para las ruedas traseras izquierda y derecha, los modelos e-tron S
proporcionan una mayor agilidad. La ventaja principal que se logran las
funciones de un diferencial trasero (como el diferencial deportivo), pero sin
necesidad de una conexión mecánica entre los dos motores eléctricos del eje
trasero, utilizando una activación basada en software. Por lo tanto, gracias la
unidad de control inteligente, Audi ha implementado una distribución de torque
activa y totalmente variable en dicho eje.
¿Cómo ha conseguido Audi esta alta variabilidad
en el sistema de tracción eléctrica?
Audi combina una
novedosa arquitectura de propulsión eléctrica con sofisticadas unidades de
control en las que todos los componentes clave del software y su integración en
red se han desarrollado de forma interna. En comparación con la tracción a las
cuatro ruedas mecánica, esto da como resultado un sistema con una respuesta muy
rápida. Además, el accionamiento eléctrico proporciona niveles de transferencia
de torque claramente superiores: se puede asignar hasta 220 Nm más a la rueda
exterior al trazar una curva, lo que, debido a la relación de transferencia,
equivale hasta 2,100 Nm por rueda. Así es como el sistema de tracción genera el
momento de guiñada deseado en las curvas: el auto presenta un movimiento
alrededor de su eje vertical en la dirección de la curva, por lo que se siente
particularmente ágil. Cuando el coeficiente de adherencia es bajo, como en
nieve o hielo, la tracción también puede optimizarse con gran precisión.
¿Puede influir el conductor en las
características de la tracción quattro eléctrica?
Los conductores pueden
adaptar la tracción Quattro eléctrica a través de dos sistemas de control. El
Audi drive select, que forma parte del equipamiento de serie en los modelos
e-tron, ofrece siete perfiles: comfort, auto, dynamic, efficiency, individual,
allroad y offroad. De este modo, la tracción eléctrica a las cuatro ruedas, así
como la suspensión y otros sistemas pueden adaptarse a las condiciones de la
carretera y a las preferencias personales. Por su parte, el sistema de control
electrónico de estabilidad (ESC) ofrece cuatro programas: Normal, Sport,
Offroad y Off. En condiciones de conducción offroad optimiza la estabilidad, la
tracción y el control de los frenos, y activa el sistema de control de descenso
de pendientes. Además, los conductores pueden seleccionar tres niveles de
recuperación en desaceleración. En el nivel 0 el auto avanza por inercia sin
retención. En el nivel 1 el vehículo desacelera ligeramente. En el nivel 2, que
tiene un rango de desaceleración de hasta 0.13 g, el conductor experimenta la
conducción “one pedal feeling” y se recupera la mayor cantidad de energía. En
el modo manual, el vehículo mantiene el nivel de recuperación seleccionado
previamente.