El TLCAN fue criticado por
no abordar los bajos salarios y las normas laborales inadecuadas que existían
en México. De hecho, como condición para aprobar el T-MEC, el Congreso de los
Estados Unidos buscó que México reforzará los derechos de sus trabajadores,
además, incluyó la el Mecanismo de Respuesta Rápida para mantenerse al
pendiente de empresas responsables por violar los derechos de libre asociación
y negociación colectiva.
¿Qué es el Mecanismo de Respuesta Rápida?
Se aplica entre EE. UU.
Y México, y entre Canadá y México, pero no entre EE. UU. y Canadá. El Mecanismo
de Respuesta Rápida se activa cuando una persona alega la negación de sus
derechos en una empresa. En México sería ante el Comité Laboral Interagencial,
mismo que solicita una revisión en la empresa para determinar si efectivamente
existe una negación de derechos. Si la empresa no está de acuerdo en realizar
la revisión, el Comité Laboral Interagencial puede pedir que se convoque un
panel que realice la verificación bajo las normas del T-MEC.
EE. UU. puede suspender
sus negociaciones con una empresa mexicana, mientras el Mecanismo de Respuesta
Rápida está en curso. En caso de encontrar una negación de derechos, EE. UU.
puede, no solo suspender el trato preferencial de los productos fabricados en
la instalación, sino imponer sanciones o denegar la entrada de los productos.
¿Qué está haciendo México para cumplir con el
T-MEC?
La reforma de la
legislación laboral de México, aprobada en mayo de 2019 en respuesta a las
negociaciones bajo el T-MEC, modificó drásticamente los asuntos laborales en el
país, en particular por la implementación de un nuevo sistema de justicia
laboral y la creación del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral
(CFCRL), cuyas principales tareas serán: supervisar el correcto desarrollo de
los asuntos colectivos y actuar como autoridad de conciliación antes de
cualquier procedimiento judicial.
La CFCRL estará a cargo
de llevar a cabo el proceso de investigación interna que constituye el primer
paso del Mecanismo de Respuesta Rápida en México. Mientras tanto, la Secretaría
de Trabajo y Previsión Social de México y la Junta Federal de Conciliación y
Arbitraje llevarán a cabo el proceso de investigación interna. En consecuencia,
a pesar de que el CFCRL aún no existe, el Mecanismo de Respuesta Rápida aún
podría activarse para hacer cumplir las obligaciones existentes en los asuntos
colectivos, ya que el T-MEC y sus mecanismos o procedimientos de disputa no
dependen de la creación de organismos gubernamentales u otros asuntos internos
de conformidad a la implementación de la Reforma Laboral en México.
¿Cuáles son las disposiciones laborales en el
T-MEC?
El capítulo 23 del T-MEC
se enfoca a los derechos laborales, que incluyen la libertad de asociación y el
reconocimiento del derecho a la negociación colectiva, eliminación del trabajo
forzoso, abolición efectiva del trabajo infantil y eliminación de la
discriminación con respecto al empleo y la ocupación. El T-MEC establece que
cada parte debe prohibir la discriminación por motivos de sexo, embarazo,
orientación sexual y la identidad de género.
Con respecto a la
producción de automóviles, el T-MEC introduce el concepto de contenido de valor
laboral (LVC), que, junto con un umbral de contenido de valor regional más alto
(75 %, frente al 62,5 % del TLCAN), determina si la importación de un automóvil
califica para el tratamiento libre de aranceles. Las reglas de LVC requieren
que al menos el 40 % de un automóvil ligero sea fabricado por trabajadores que
ganen al menos $ 16 por hora, y que al menos el 25 % de esos trabajadores con
salarios altos estén involucrados en materiales y fabricación. Estas nuevas
reglas de LVC se implementarán por completo durante tres años.
¿Cómo afectan las disposiciones laborales del
T-MEC a las empresas multinacionales?
Uno de los principales
objetivos del T-MEC es efectuar cambios en las reglas laborales de México. Si
bien en mayo de 2019 se implementó una importante reforma de la legislación
laboral en previsión de que el T-MEC entre en vigencia, muchas de las reglas
que garantizan la libertad de asociación y negociación colectiva de los
trabajadores aún se están discutiendo en el proceso legislativo. Además, la
reforma de la legislación laboral mexicana aún se encuentra en su etapa inicial
de implementación, lo que significa que podrían pasar años antes de que la
nueva legislación se aplique de manera efectiva y completa. Es decir, las
multinacionales que trasladaron partes de sus operaciones o fabricas a México
para aprovechar el TLCAN, se enfrentan a un panorama cambiante en términos de
relaciones laborales en los próximos años a medida que México actualice sus
leyes para cumplir con las disposiciones laborales del T-MEC.
Las multinacionales
también deben estar atentas a las actividades del Comité Laboral Interagencial,
ya que esta tiene la tarea de recibir peticiones de empresas privadas como
parte del Mecanismo de Respuesta Rápida. Además, el Comité Laboral
Interagencial tiene el poder de monitorear el cumplimiento de México con los
requisitos laborales del T-MEC. Por otra parte, se creará una línea directa
para que los trabajadores denuncien violaciones laborales en México. Las
acciones coercitivas provocadas por estas peticiones e informes pueden dar
lugar a inspecciones de fábrica, la pérdida del trato arancelario preferencial
o la denegación de importaciones de productos.
¿Qué deberían hacer las empresas ahora que el
T-MEC está en vigor?
La Oficina de Aduanas y
Protección Fronteriza de EE. UU. Ha anunciado que, durante los primeros seis
meses de implementación, mostrará moderación en su aplicación y, en cambio, se
centrará en apoyar los esfuerzos de las empresas para cumplir las disposiciones
laborales.
Por ello, los
empleadores deben invertir tiempo y esfuerzo para comprender las diversas
disposiciones laborales y los mecanismos de denuncia y ejecución incorporados
en el T-MEC. Las empresas que tienen operaciones en México deben actualizar sus
reglas y acuerdos laborales. Si aún no lo han hecho, deben alinearse con las
nuevas reformas laborales de 2019 de México y monitorear los próximos cambios
laborales. Además, tendrán que revisar que sus proveedores estén cumpliendo
adecuadamente con las leyes laborales.
La industria automotriz (incluidos
los proveedores intermedios) deberá capacitar a los empleados que supervisan
las operaciones y el cumplimiento comercial de las reglas de LVC, para
maximizar las oportunidades a medida que los fabricantes de automóviles en
América del Norte cambien su producción durante los próximos tres años para
calificaren el marco del T-MEC.