En
esta planta de autopartes Tier 1 al norte del país —cuyo nombre me reservo por
motivos de confidencialidad—, las cosas ya nunca serán como antes. Los
operarios saben que hay una nueva normalidad y que el 'business as usual' será una frase anecdótica y nunca más significará seguir las mismas reglas que
antes. En esta fábrica, al igual que en el resto de la cadena de valor
automotriz, el impacto del Covid-19 se ha dejado sentir, obligando a parar la
producción durante semanas y apenas reanudarla, entre incertidumbre y temor, ante
la posibilidad de vivir un brote, lo cual sería desastroso.
Los
directivos lo saben y tomaron medidas para evitarlo. De eso se trata: aceptar
que las cosas ahora son distintas y planear una estrategia. Antes de reiniciar
operaciones, algunas empresas han pensado aplicar test en línea a sus empleados
antes de que lleguen a la planta a fin de descartar síntomas. Esto está
perfecto, pero, ¿qué sucede si los datos del test son erróneos? ¿Qué puedes
hacer en tu caso para administrar, de una forma segura y eficiente, una planta
industrial en medio de esta pandemia? Y, sobre todo, ¿qué puedes hacer para no
invertir nuevamente en adquirir mucha infraestructura y recursos tecnológicos
para hacerle frente al Covid-19?
La
empresa con la que empieza este texto es el ejemplo perfecto para explicar lo
anterior, ya que, antes de la pandemia, se encontraba invirtiendo en soluciones
de Industria 4.0, específicamente en tecnologías de Computer vision para
detección de defectos en sus productos terminados; ahora, con la asesoría
correcta, podrán aprovechar algunas de estas inversiones, pero ahora para
monitorear la salud y hábitos de sus empleados en distintos puntos. La
utilización de Computer Vision funciona perfecto para instalar puntos de
revisión en la entrada de la planta y descartar fiebre. Luego, durante su
estancia en la línea de producción, esta tecnología es muy efectiva para
verificar que están cumpliendo con todos los protocolos de higiene y seguridad,
como el distanciamiento social.
La
seguridad de los trabajadores debe estar en el centro de todo ante la amenaza
de nuevos brotes. ¿Cómo puedes gestionar este factor sin vulnerar tu eficiencia
y productividad al interior? En este caso la medida adecuada no solo tiene que
ver con tecnología, sino con ejecutar cambios operacionales. Un reporte de
McKinsey & Company encontró que algunas empresas industriales crearon
equipos ágiles y autónomos donde los miembros asumieron varias funciones y
limitaron el contacto físico con otros. Esto incluyó, por ejemplo, asignar
trabajadores a una línea de producción específica y eliminar, en la medida de
lo posible, aquellos puestos que estaban flotando entre una y otra. Las juntas
para transferencia de turno se hicieron mediante videoconferencias y limitaron
la mayor cantidad de trabajadores a una actividad.
Esto
desde luego crea un ambiente de mayor seguridad para los trabajadores, pero un
aprendizaje que nos ha dejado esta pandemia es la necesidad de adaptarnos de
forma ágil a una operación remota. Es otra medida que debes seguir teniendo en
cuenta. Deberás escalonar turnos por áreas para evitar aglomeraciones de gente
en el mismo lugar de trabajo, por lo cual, quienes deban operar desde sus casas
necesitarán herramientas tecnológicas para hacerlo de forma eficiente.
El
IoT para el monitoreo remoto es una herramienta ideal para esto, no solo porque
te permite seguir en tiempo real lo que sucede con equipos y procesos críticos,
sino porque, combinado con una herramienta de analítica predictiva (Machine
Learning), es capaz de predecir eventos que podrían generarte problemas —una
interrupción por alguna falla en el equipo— y actuar en consecuencia, con la
suficiente anticipación.
Ya
puedes ir aceptando —y adaptarte— esta nueva normalidad. El Covid-19 ha sido un
gran catalizador para impulsar la transformación digital incluso en las
industrias más tradicionales, y nos ha empujado a ser más creativos y a
utilizar nuestros recursos al máximo.
Cierto
que esta enfermedad ha puesto de cabeza al mundo, pero también tiene un sentido
práctico para los negocios, y ese es que ciertamente ha orillado a que las
empresas consideren otras iniciativas y herramientas digitales para hacerse más
eficientes y seguras, lo cual deberá traducirse en una mayor productividad en
sus líneas, reducir scrap, defectos, etcétera, y todo ello en un marco donde la
salud de los trabajadores está en el centro de todo, aprovechando al máximo sus
inversiones en hardware y software. Ya lo sabes, el business as usual
nunca será lo mismo y más vale adaptarse a esta nueva normalidad lo antes
posible.
Por:
Jair Pérez, cofundador y CEO de Gesta Labs, estudio de innovación en Industria
4.0
jair@gestalabs.com