Como se indicó anteriormente, Toyota pretende reanudar gradualmente sus operaciones de manufactura en la región de Norteamérica, que incluye Estados Unidos, Canadá y México, de acuerdo con las pautas federales relacionadas a la salud y seguridad, así como a los decretos locales y estatales de donde se encuentran nuestras instalaciones.
'La salud y la seguridad de nuestros colaboradores y socios estratégicos continúan siendo una prioridad. Por eso hemos implementado nuevos protocolos en todas nuestras plantas de manufactura de Norteamérica para ayudar a mitigar la propagación de COVID-19.
Continuaremos acatando todas las pautas de seguridad y monitoreando la demanda de vehículos, a medida que aumentamos cuidadosamente la producción', fin del comunicado.