El Latam Mobility Summit, el encuentro de movilidad
sostenible más importante de Latinoamérica, se dio cita el 12 y 13 de febrero
en el World Trade Center de la Ciudad de México con más de 1000 asistentes, 100
ponentes y 150 aliados estratégicos.
Una de las noticias más relevantes del evento fue la
participación de la firma mexicana Grupo IUSA, fundada en 1939, y que ha sido
conocida por sus innovaciones y tecnologías para sectores de la construcción, energético,
de telecomunicaciones, y ahora, de movilidad eléctrica y sostenible.
Los creadores de IUSACELL y una de las primeras compañías en
México en producir páneles solares y calentadores solares en masa presentaron
su división IUSA Electromovilidad, dedicada a la producción y
comercialización de vehículos eléctricos e híbridos para el mercado nacional y latinoamericano.
Juan Carlos Peralta, Vicepresidente de IUSA, fue el
encargado de dar a conocer los primeros cuatro vehículos eléctricos de la
línea, todos desarrollados y fabricados en la planta de IUSA en Pastejé,
Estado de México, con capacidad para fabricar 20 vehículos por semana, o
alrededor de 1000 por año.
'Aprovechamos esta oferta de intercambio para presentar
nuestra familia de vehículos eléctricos para atender el problema de la gran
falla por la contaminación de los vehículos de combustión interna, esta es
nuestra solución al problema', declaró en el evento.
LOS CUATRO VEHÍCULOS DE IUSA ELECTROMOVILIDAD
BALAAM (significa jaguar en maya)
Autobús 100% eléctrico para transporte público urbano.
Capacidad: 40 pasajeros.
200 km de autonomía por carga con batería de 177 kWh.
Freno regenerativo de 14% de capacidad. Pastillas de frenos para
reducir contaminación sonora y disco de embrague de larga vida.
Cámara en retrovisor de 5 pulgadas, letrero electrónico de
ruta delantero, lateral y trasero; iluminación interior LED y sistema de
vigilancia de 500 gb con 5 cámaras.
Bajo costo de mantenimiento.
Velocidad máxima: 100 km/h.
3 años de garantía (200,000 km).
OLIN (significa movimiento permanente en náhuatl)
Van híbrida de rango extendido.
Capacidad: 20 pasajeros.
Batería de accionamiento eléctrico por carga en red y motor de
gasolina de cuatro cilindros en línea con 16 válvulas y rendimiento de 10.4
km/L.
Autonomía: 400 km con tanque y carga llena.
Freno regenerativo de 14% de capacidad. Frenos ABS, control
de estabilidad.
Suspensión de muelle y cinco hojas.
Velocidad máxima: 120 km/h.
3 años de garantía (200,000 km).
IIK (significa aire en maya)
Minivan eléctrica.
Capacidad: 5 pasajeros.
Autonomía de 440 kilómetros por carga en velocidad constante
y 330 km en ciudad (tiempo de carga: 2 horas).
Motor sincrónico de imán permanente con batería de litio
ternario y carga de 36.2 kWh.
Maletero frontal de 100 L y trasero con asientos replegados
de 1300 L.
Frenado regenerativo con 14% de capacidad. Frenos ABS, EBD,
monitoreo en tiempo real, dirección electro asistida.
Luces LED, consola central digital, asientos ajustables de
fibra sintética.
Transmisión automática.
Velocidad máxima: 100 km/h.
3 años de garantía (200,000 km).
ATL (significa agua en náhuatl)
SUV eléctrica.
Capacidad: 7 pasajeros.
Motor eléctrico sincrónico de imán permanente.
Autonomía de 310 km.
Batería de 41.2 kWh y carga rápida completa en dos horas.
Frenos regenerativos con hasta 14% de capacidad. Frenos de
disco delanteros, ABS en eje trasero con frenos de tambor, dirección electro
asistida, suspensión independiente.
Faros frontales de halógeno, faros de niebla.
Radar de reversa, sonido subwoofer, panel de instrumentos
LED, conexión MP3/USB, asientos traseros abatibles, ventanas eléctricas, aire
acondicionado/calefacción, control remoto de seguros, seguro para niños y
alerta de cinturones.
Velocidad máxima: 140 km/h.
3 años de garantía (200,000 km).
Cada año son más las marcas de autos mexicanas y las compañías de tecnología que están incursionando en el sector, detectando una oportunidad de negocio que las OEMs que ya ofrecen este tipo de vehículos no pueden cubrir del todo debido a los limitados números de unidades disponibles para México, aunque el mercado de vehículos híbridos y eléctricos crece exponencialmente. La principal dificultad será la adopción de políticas e incentivos junto a una infraestructura adecuada para que este tipo de marcas prosperen en nuestro país.