Una fusión como esta tendría una suma de 35 mil millones de dólares, convirtiendo el grupo resultante en el tercer fabricante más grande del mundo, y modificando el panorama de competencia para compañías como General Motors y Ford en Estados Unidos, y para PSA Group en Francia.
Peugeot, compañía central de PSA Group buscaba realizar una fusión con FCA pero esta no llegó a concretarse.
Esta misma mañana, ejecutivos de FCA están reunidos con sus similares de Renault en Francia, para dar inicio al proceso de fusión.
Las acciones de ambas compañías subieron al darse a conocer la noticia, ya que la fusión resultaría en una producción anual de casi 9 millones de vehículos al año, y ahorros por 5.6 mil millones de dólares anuales.
De esta forma, tendrían el tercer lugar a nivel mundial, por debajo de Toyota y Volkswagen, los fabricantes más grandes del mundo actualmente.
RETOS EN PUERTA
Se presume que la alianza actual entre Renault-Nissan-Mitsubishi pueda tornarse problemática con la fusión con FCA, aunque esto no involucre fusión entre los japoneses y los italoamericanos. Otro problema es la participación accionaria del gobierno francés en Renault (15%), que podría generar problemáticas de índole política y sindical ante cualquier cambio que la fusión genere en Francia.
Mike Manley, CEO de FCA, confirmó que la fusión podría tardar un año en consumarse.
Con información de: Reuters.