Nuestro mundo, nuestras vidas, los trabajos que hacemos y las
formas cómo los hacemos están cambiando. Lo que pensábamos era una industria de
hombres, agresiva y voraz; hoy es una industria enfocada en la digitalización, la tecnología, los robots y por
supuesto, la participación de talentos femeninos.
Ya sea en el diseño,
la operación o en la toma de decisiones, la búsqueda sin freno de habilidades
y perspectivas distintas le ha dado espacio al género femenino en la industria
automotriz.
Estudios como Women at the Wheel, de Deloitte, han destacado
la relevante presencia de éstas, que globalmente nos llevan a pensar en Mary
Barra, CEO global de General Motors y en su junta de tomadores de decisiones,
cada vez con mayor número de mujeres en ella (6 de 11 miembros de junta).
En México tenemos íconos
femeninos como Mayra González, Directora General de Nissan México, Maru
Escobedo, CEO de BMW México o Magdalena López, CEO de Renault México.
Para que esto suceda en un país, que hay que aceptar, es aún
predominantemente machista es una muestra no solo de apertura, sino de fuerza
de todas aquellas mujeres que no dejan
de trabajar con excelencia y poner el ejemplo a todos y todas.
Precisamente, Women at the Wheel destaca las dificultades
que las mujeres aún encuentran al integrarse a esta industria. Entre ellas
están:
·
El ambiente
laboral (del total de encuestadas, 65% no considera atractivo el ambiente
de trabajo).
·
Falta de balance
de vida (59% no ve un equilibrio que permita alinear sus objetivos
personales con los profesionales).
·
Falta de horarios
flexibles (46% preferiría tener opciones laborales menos absorbentes, como
el home office).
Ahora, esto resulta importante, porque son estos los tres principales puntos de trabajo que
muchas empresas del sector automotriz están cambiando para mejorar la
calidad de vida laboral de sus colaboradores.
Las principales tendencias a solucionar estas problemáticas,
que aunque son paulatinas y tardaremos varios años en verlas normalizadas, son:
·
La promoción de un ambiente de trabajo en el que
hay cero tolerancia a abusos, acosos
y se promueve un desarrollo de la empatía en el trabajo.
·
Programas
sociales y de comunidad que permiten a los colaboradores superarse no solo
como profesionales, sino como personas íntegras.
·
El cambio
de la jornada tradicional de trabajo: la automatización y la digitalización
de procesos cambiará la forma y el lugar de trabajo, reduciendo las horas que
muchos puestos demandan actualmente.
Pronto podremos ver como el 20% de liderazgo femenino en las juntas directivas de las grandes
compañías automotrices y de otros sectores se eleva.
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Lee el estudio completo aquí:
Fotografía de portada: GM’s ‘Be The Spark’, evento en Detroit,
marzo 2019.
Fotografía en artículo: Alexa Ellswood, GM Operational
Excellence Manager and GM Women Communities and Culture, mismo evento, marzo
2019, The Seen Magazine.