Al menos la mitad de la producción de automóviles del Reino
Unido ha parado, y Jaguar Land Rover
realiza un paro de 5 días en su producción, después de anunciar una caída
en sus ventas globales.
La decisión del paro se tomó hace un par de meses, cuando se
anunció que la fecha de salida del Reino Unido de la Unión Europea sería el 12 de abril.
El poco orden dentro de las negociaciones del Brexit ha
generado retrasos en la cadena de suministro
automotriz, una burocracia aduanera más complicada y la necesidad de volver a
certificar automóviles que estaban listos para su venta, con aranceles de hasta
10% adicional.
La primera ministra Theresa May busca obtener una extensión
a la fecha de salida, mientras que las automotrices que decidieron parar han ajustado sus volúmenes de proveeduría y
programado vacaciones para su personal.
Otras plantas que pararon por completo esta semana incluyen
las de BMW-Mini, Rolls-Royce, Vauxhall y
Honda.
Estas plantas, junto a JLR producían hasta el año pasado más de 750,000 vehículos en total.
JLR tuvo que recortar la producción el año pasado, y hasta
marzo de 2019, sus ventas globales cayeron
casi un 6 por ciento, a 578,915 vehículos. Sin embargo, las ventas en el
Reino Unido aumentaron un 8,4 por ciento.