Este lunes, Trump propuso en la Casa Blanca eliminar los
créditos a autos eléctricos, mientras que los principales fabricantes de
automóviles en Estados Unidos siguen presionándolo para extender los créditos e
incluirlos en un paquete de disposiciones fiscales definidas.
El crédito actual
tiene un alcance de hasta 200,000 unidades vendidas por año, cifra que en 2018
solo pudieron sobrepasar Tesla y General Motors.
Los consumidores de Tesla reciben desde el 1 de enero un
crédito de $3,750 USD el 1 de enero, mismo que irá bajando hasta $1,875 USD en
un periodo de seis meses a partir de julio.
De la misma forma, el crédito para los vehículos de GM caería
a $3,750 el 1 de abril y luego bajará a $1,875 en octubre.
Ambos créditos
desaparecerían en 2020. En enero para Tesla, y en abril para GM.
Los créditos llamaron la atención del Congreso y de Trump
cuando se estimó el costo de los créditos actuales en $7,5 billones de dólares
de mantenerse entre 2018 y 2022. Trump ya había amenazado a GM con eliminar los
subsidios como castigo por cerrar plantas en Norteamérica, mover producción a
México y entrar con mayor fuerza en el mercado de autos eléctricos.
Sin embargo, dicha
propuesta no contaría con aprobación mayoritaria del congreso, ya que los
demócratas se oponen a dicha medida y prefieren continuar con los subsidios.
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