El dueño y fundador de la compañía de autos eléctricos,
anunció mediante su cuenta de Twitter la decisión de hacer públicas todas las patentes de su dominio que se usan en Tesla.
Según el mismo Musk, esta
medida permitirá que los autos eléctricos sean más accesibles, permitiendo
a las compañías aprovechar las patentes sin ser demandadas, siempre que actúen de
buena fe, deseando sumarse al combate contra el uso del petróleo.
En la industria automotriz, rara vez se liberan ideas y tecnologías que representan ventajas
competitivas y beneficios económicos.
En su cuenta de Twitter, el CEO se expresó de la siguiente
manera:
Nuestro verdadero rival no es el
pequeño charco de autos eléctricos que no son de Tesla, sino el diluvio de
autos de gasolina que salen de las fábricas cada día.
Tesla Motors fue creada para acelerar el advenimiento del transporte
sostenible. Si abrimos un camino hacia la creación de vehículos eléctricos
atractivos, pero luego dejamos a nuestro paso ‘minas terrestres’ de propiedad
intelectual para inhibir a otros, estamos actuando de manera contraria a ese
objetivo.
El físico multibillonario nunca ha ocultado su escepticismo
respecto a las patentes, declarando con frecuencia que solo sirven como barreras para reprimir el progreso de la humanidad,
enriqueciendo a corporaciones en lugar de a los inventores y consumidores.
Anteriormente, Tesla
se vio obligado a registrar sus patentes, solo como protección ante otras
grandes compañías automotrices, pensando que solo las usarían para
enriquecerse más al dominar el mercado, en lugar de buscar la transición
completa a vehículos eléctricos.
De los 100 millones
de automóviles que se producen cada año en el mundo, solo un porcentaje
minúsculo corresponde a autos de combustibles limpios o completamente
eléctricos. Muy pocos fabricantes cuentan con modelos de estas
características, y quienes sí los tienen producen una cantidad muy pequeña.
Tesla por sí misma
jamás podría fabricar suficientes autos para enfrentar la crisis del carbono,
con todo y que sus fábricas son las más grandes del mundo, por lo que creen
que aplicar la filosofía de código abierto a sus patentes fortalecerá la
posición de Tesla en lugar de debilitarla.