El dueño de Tesla ha llegado a un acuerdo con sus homólogos de General Motors y Nissan en Estados Unidos.
El éxito de Tesla en la venta de sus vehículos completamente eléctricos ha llevado a la compañía de Elon Musk a superar con creces las 200 mil unidades fabricadas.
Sin embargo, el triunfo es un arma de doble filo. La normativa estadounidense indica que las marcas que superen esa cantidad de ventas perderán los beneficios fiscales, que oscilan entre 2 mil 500 y 7 mil 500 dólares (entre 2 mil y 7 mil euros). De ahí se desprende el último e inteligente movimiento realizado por Musk.
El dueño de Tesla ha llegado a un acuerdo con sus homólogos de General Motors y Nissan en Estados Unidos. La EV Drive Coalition, como han bautizado a la triple alianza, se ha volcado directamente en conseguir que el Congreso extienda el crédito fiscal para los consumidores y marque un estándar de 7 mil 500 dólares por vehículo, el máximo hasta ahora.
Tesla superó el tope de 200 mil unidades el pasado julio; General Motors espera alcanzar ese límite a finales de año, según cálculos de Bloomberg, y Nissan ha vendido cerca de 125 mil vehículos eléctricos desde septiembre, por lo que se espera que supere el límite antes incluso de que acabe 2018.
“Un crédito fiscal para los consumidores es parte integral para alcanzar un futuro con cero emisiones, y situar a EE UU como líder en electrificación”, aseguró Dan Turton, vicepresidente de políticas públicas de General Motors.