La planta
de 1,400 millones de dólares conocida como COMPAS, ubicada en Aguascalientes,
integra operaciones de Nissan y Daimler para producir autos de sus marcas Infiniti
y Mercedes-Benz y este año sumará un nuevo modelo a sus líneas.
En la
planta, inaugurada en 2017, se producen los modelos Clase A de la marca alemana
y la Infiniti QX50, de la cual se produjeron 30,294 unidades en 2019.
Una
versión derivada de este crossover japonés de lujo, la QX55 (coupé) se esperaba
que llegara a las agencias en Norteamérica este verano, pero la producción en
Aguascalientes fue confirmada como retrasada hasta noviembre.
El QX50
2019 estrenó una nueva generación del modelo, con un innovador motor VC-Turbo
(de compresión variable, el primero en el mundo de su tipo). Se espera que este
motor también venga en el QX55 coupé. Además de tener solo 3 puertas, el QX55
parece contar con una parte trasera para carga más larga y baja que el QX50. El diseño final de este modelo aún no ha sido presentado oficialmente.
El auto
competirá contra la GLC Coupé de Mercedes-Benz y la BMW X4 hecha en Spartanburg,
Carolina del Norte.